Perspectivas suizas en 10 idiomas

Lucha por futuro de región vitivinícola de la UNESCO

Espectacular vista de la región de Lavaux, "paisaje cultural" de la Humanidad. Keystone

La espectacular región de Lavaux es famosa por sus viñedos en terrazas, sus uvas chasselas y el estatus de Patrimonio Mundial de la UNESCO. Pero su tranquilo esplendor se contradice con una fuerte lucha que se decidirá en mayo en torno a la protección de la zona y su futuro económico.

El silencio en los escarpados viñedos de Chexbres, con vista al lago Leman, solamente es interrumpido por el canto ocasional de las aves y el ruido producido por los trabajadores que limpian las malas hierbas en una de las 10.000 terrazas.

Constant Jomini se abre camino a lo largo de las líneas de viñas en su propiedad de cuatro hectáreas al inspeccionar las primeras hojas que brotaron entre los primaverales rayos de sol.

El vitivinicultor local (36 años) tiene motivos para regocijarse. El negocio va para arriba. Sus botellas de chasselas y pinot noir han atraído una mayor atención recientemente, incluso entre los compradores suizos de habla alemana y se venden bien. Tanto es así que invirtió fuertemente en una nueva bodega para satisfacer la futura demanda.

Sin embargo, le preocupa lo que pueda suceder.

Salvemos Lavaux: Todo el mundo quiere salvar Lavaux, especialmente los vitivinicultores. Pero eso significa que los viñedos tienen que sobrevivir y para eso requerimos desarrollo. No hablo de construir un edificio en medio de los viñedos, pero en los pueblos tenemos que ser capaces de ampliar nuestras casas, crear bodegas y construir apartamentos de vacaciones”, advierte.

Mostrar más

Su inquietud por la región vitivinícola, cuyos orígenes se remontan al Siglo XI,  se deriva de la denominada iniciativa Salvemos Lavaux III que será sometida a escrutinio el 18 de mayo.

Lavaux es un distrito del cantón de Vaud ubicado al noreste del Lago Leman. La prestigiosa región vitivinícola se extiende unos 15 kilómetros desde  Vevey hasta  los suburbios del este de Lausana y comprende 840 hectáreas de viñedos en terrazas que cubren las faldas de la ladera de la montaña entre los pueblos y el lago. Cuenta con 28.000 residentes.

Aunque hay alguna evidencia de que las vides se cultivan en la zona desde la época de los romanos, los vestigios de las terrazas remontan al Siglo XI, cuando benedictinos y cistercienses controlaban la zona.

Los vinos producidos son principalmente Chasselas (68,5%), Gamay (10,9 %) y Pinot Noir (11,5 %). Están agrupados en ocho denominaciones de origen controlado (AOC) o protección designada de origen de los vinos: Calamin, Chardonne, Dézaley, Epesses, Lutry, St-Saphorin, Vevey-Montreux y Villette. Actualmente hay 200 vitivinicultores en Lavaux.

En esa fecha, los electores del cantón de Vaud deberán pronunciarse por una de dos propuestas. Una, lanzada en 2009 por el activista Franz Weber y que fue clave en las dos iniciativas anteriores para proteger Lavaux, con el apoyo de organizaciones ambientalistas como WWF y Pro Natura. Pide normas más estrictas de planificación para hacer frente a la desenfrenada especulación inmobiliaria que -acusan sus artífices-, devora lentamente la región.

La segunda es una contrapropuesta cuyos partidarios, principalmente partidos políticos y vitivinicultores de Lavaux, insisten en que la región ya está bien protegida por las leyes cantonales y federales existentes, al grado que la UNESCO le concedió el estatus de Patrimonio Mundial como “paisaje cultural” en 2007. Afirman que su propuesta, con el apoyo de todos los partidos, garantizaría la protección y el desarrollo socioeconómico de la región, en lugar de medidas radicales para mantenerla “como un bosque o un parque nacional”.

Su plan reduciría la escala de las zonas en las que la gente puede construir, pero autorizaría edificación de inmuebles públicos y viviendas. También promete apoyo financiero a los vitivinicultores para el mantenimiento de sus terrazas.

Los argumentos de ambas partes se leen en afiches distribuidos por toda la región y son divulgados por medio de una campaña de videos.

Poco a poco

La empresa familiar de Constant Jomini prospera, pero no todos son tan afortunados. Algunos vitivinicultores suizos han padecido, luego de una reciente caída de los precios, un menor número de bebedores de vino y la competencia extranjera. Les preocupa que la iniciativa puede ser el último clavo en el ataúd.

“El primer riesgo para Lavaux es la muerte del negocio de la elaboración de vino, no la especulación inmobiliaria”, dijo Jean-Christophe Schwab, del Partido Socialista, que apoya la contrapropuesta, en una reunión a la que asistieron 300 vitivinicultores en marzo, en Chexbres.

Pero Suzanne Debluë no lo ve de esa manera. Durante 40 años, esta residente de Lutry ha seguido los pasos de su padre contra los proyectos de construcción, para evitar “el deterioro de este patrimonio”.

“Esta campiña es de todos nosotros, no solamente de los propietarios que creen que pueden hacer con ella lo que quieran”, dice al señalar las residencias que salpican la ladera de esa comuna.

La secretaria de la asociación Salvemos Lavaux considera que los promotores inmobiliarios socavan lentamente el lugar y que los vitivinicultores hacen caso omiso de la realidad o trabajan con aquellos que toman las decisiones. Algunos alcaldes han hecho un buen trabajo para la protección de sus comunas, pero no el suficiente, lamenta.

“Las dos iniciativas anteriores de Lavaux han logrado proteger una gran parte de la zona central vitivinícola. Pero las partes altas – la llamada corona – y la orilla del lago han sido mal manejadas en los últimos 30 años”, subraya.

Los impulsores de la iniciativa dicen que ese problema se ha agravado en los últimos años debido a la presión demográfica de Lausana y Vevey. Con testimonios fotográficos, Debluë sostiene que los grandes promotores inmobiliarios transforman antiguas propiedades vitivinícolas y construyen lujosos apartamentos y residencias de millones de francos fuera del alcance de la mayoría de los lugareños.

Mostrar más

“Desde julio de 2011, 450 proyectos de construcción han sido abiertos al escrutinio público en las comunas de Lavaux, pero solamente una decena concierne a estructuras relacionadas con el vino”,  precisa el abogado de la iniciativa, Laurent Fischer.

La UNESCO concedió a la región de Lavaux el estatus de Patrimonio de la Humanidad como “paisaje cultural” en 2007.

El estatus no impone ninguna obligación de protección para los vitivinicultores o las autoridades. Pero para mantener el que es visto por algunos como un sello de mercadotecnia, los suizos deben seguir un plan autorizado para conservar el “valor universal excepcional” del lugar.

Este último incluye estrategias para la investigación y la cultura, la economía, la planificación del uso de la tierra y el turismo, y es supervisado por una asociación formada por políticos locales, bodegueros y empresarios.

Según el vitivinicultor Bernard Bovy, el estatus de la UNESCO “protege las piedras pero también a las personas y su trabajo”. Pero los defensores de la iniciativa ‘Salvemos Lavaux’ argumentan que la distinción no ha cambiado nada. “Por el contrario, ha aumentado el atractivo de la región para personas que quieren vivir allí”. Hasta ahora, la UNESCO se ha mantenido fuera del debate.

“Desde la inscripción, la UNESCO no ha comentado nada sobre el estado de conservación de Lavaux”, dijo Oliver Martin, jefe de la sección de patrimonio cultural en la Oficina Federal de la Cultura.

Esas cifras son impugnadas por opositores como el fabricante de Chardonne, Maurice Neyroud , que dijo que eran “inventadas” y calificó el asunto de “escandaloso”. Pero hay algunas voces aisladas de protesta entre los vitivinicultores locales, como la de Marco Leyvraz, de 90 años, quien denuncia la “nueva invasión de la propiedad y del dinero”. “Me repugna”, dijo a los periodistas durante la presentación de la iniciativa.

Los partidarios de la propuesta de Weber quieren ampliar el área protegida actual hacia el norte y el sur dada la creciente urbanización y para retirar de las manos de las comunas locales los planes de urbanismo de Lavaux.

Bajo su propuesta, nuevas construcciones serían estrictamente limitadas, pero se harían excepciones para permitir a los productores de vino continuar con la transformación y renovación de su infraestructura según sus necesidades y con respeto al carácter tradicional de los poblados. Los trabajos en edificios públicos como hospitales, escuelas y residencias de ancianos también estarían exentos.

Constante Jomini no cree una sola palabra.

“¡Excepciones! ¿Qué van a hacer? ¿Autorizar a unos y a otros no?”

Dirige la mirada a la distancia, en dirección de los Alpes.

“Esta es una iniciativa de más. Si Lavaux se convierte en un museo no habrá desarrollo y si no hay desarrollo, será la muerte lenta de la viticultura y la UNESCO ya no aceptará Lavaux como región protegida… ese es el gran riesgo”.

Traducción del inglés, Marcela Águila Rubín

En cumplimiento de los estándares JTI

Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI

Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.

Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.

SWI swissinfo.ch - unidad empresarial de la sociedad suiza de radio y televisión SRG SSR

SWI swissinfo.ch - unidad empresarial de la sociedad suiza de radio y televisión SRG SSR