Iniciativa suiza en comicios colombianos
El próximo 30 de mayo, la ciudadanía colombiana acudirá a las urnas para elegir al sucesor del presidente Álvaro Uribe. Antanas Mockus, del Partido Verde, y Juan Manuel Santos, del oficialista Partido de Unidad Nacional, tienen las mayores posibilidades.
“Es un momento muy interesante”, califica el embajador de Suiza en Colombia, Didier Pfirter y considera que entre los mayores desafíos del nuevo mandatario está el de fortalecer el ámbito social en el país.
A iniciativa del embajador de Suiza en Colombia, Didier Pfirter, el Grupo G-24 envió el pasado mes de enero a los entonces siete candidatos a la presidencia de la República, una carta invitándolos a participar en lo que se convertiría en un Acuerdo Democrático Fundamental.
Los aspirantes a la Primera Magistratura colombiana y sus representantes elaboraron un documento, concebido como “pacto nacional” entre las fuerzas políticas del país y que sintetiza los principios mínimos comunes tendientes a promover las reglas del juego democrático.
En entrevista con swissinfo.ch, el representante oficial de Suiza en Bogotá habla de esa iniciativa y de la situación del país andino que se prepara para elegir un nuevo presidente el próximo domingo, 30 de mayo.
swissinfo.ch: ¿Cómo surge este Acuerdo Democrático Fundamental?
Didier Pfirter: Fue una iniciativa de Suiza que, desde principios de este año, tiene la presidencia del G-24. A principios de enero, la Embajada de Suiza escribió una carta a todos los candidatos presidenciales invitándolos a participar en lo que habíamos llamado “consenso democrático mínimo”, el título que tiene ahora se lo dieron ellos. Invitamos a los candidatos a mi residencia para que discutieran amigablemente con sus adversarios si algo así era posible y debo decir que para mi gran sorpresa, la reacción fue muy positiva. Yo esperaba más dificultades y no me esperaba un texto que fuera tan lejos. Pensé que sería mucho más modesto, mucho más general y me sorprendió lo bien que se pusieron de acuerdo en ir bastante lejos en la sustancia.
swissinfo.ch: ¿En qué medida comparte usted, como observador político y embajador de Suiza, la postura del Gobierno colombiano en el sentido de que en el país hay problemas pero se redujeron significativamente?
D.P.: Yo creo que la observación es cierta y que existe esta tendencia. En lo general, la sensibilidad de los órganos del Estado se ha mejorado en cuanto al respeto de los derechos humanos. Hay regiones y grupos vulnerables como los indígenas y los afrocolombianos para los que quizá no sea verdad, sobre todo en las regiones más marginales del país, a lo largo de las fronteras, en el Pacífico, en la Amazonía, donde los grupos armados se han retirado y por lo tanto se dan más enfrentamientos que antes. También ha habido el gran escándalo de lo que llaman “falsos positivos” (civiles asesinados y disfrazados de guerrilleros por algunos elementos dentro de las Fuerzas Armadas para mejorar su balance de bajas del adversario).
Eso es algo muy grave, lo ha dicho el mismo Gobierno. El Gobierno ha tomado medidas importantes contra los sospechosos de ser responsables y los juicios todavía están en camino. Lo positivo, si puedo decir así en este contexto, es que desde 2008, desde que este escándalo llegó a la luz del día, ha habido muy pocos casos, entonces parece que las fuerzas armadas han aprendido esta lección.
swissinfo.ch: ¿Cómo caracteriza el momento actual de Colombia?
D.P.: Es un momento muy interesante. Mis amigos colombianos me dicen que no recuerdan unas elecciones tan abiertas como éstas. Representantes del Gobierno tienen la misma visión. Tradicionalmente las elecciones presidenciales en Colombia son de personas más que de partidos políticos.
swissinfo.ch: ¿Cuál será el mayor desafío para la persona que gane?
Pues el gran desafío es que el presidente actual deja su cargo con una altísima popularidad y esto es siempre difícil para el sucesor porque inevitablemente va a ser medido con el presidente actual. El desafío es mantener la seguridad y mejorarla porque quedan muchas cosas que hacer en ese ámbito. Y hacer otras cosas importantes y necesarias, sobre todo en el ámbito social, que en los últimos años no han tenido la misma prioridad que podría ser deseable, ya que por razones que hay que entender también, el asunto de la seguridad, en la situación que vivía Colombia hace 8 años, requería toda la prioridad sobre otros asuntos. Pero en este momento, y lo dicen casi todos los candidatos, es importante para estabilizar estos logros, completarlos con logros en el ámbito social.
swissinfo.ch: ¿Por qué se da un conflicto tan prolongado en un país tan rico como lo es Colombia?
D.P.: Uno de los argumentos era que es justamente la riqueza de Colombia la que ha sido su flagelo de cierta manera porque ha atraído a mucha gente que se quería aprovechar de esta riqueza y que utilizó todos los medios. Hay otros elementos que están en la historia del país, sobre todo el conflicto muy prolongado entre los grandes partidos tradicionales de los conservadores y los liberales que ha generado una tradición de violencia que después se ha extendido a otros frentes: por ejemplo las FARC son una emanación directa de este conflicto entre conservadores y liberales. Nacieron de una corriente del Partido Liberal que no estuvo de acuerdo con el compromiso histórico que celebraron los liberales y los conservadores hace casi 60 años.
swissinfo.ch: Suiza ha tenido un papel particular como mediador para la búsqueda de una paz negociada…
D.P.: Siempre hemos estado a favor de negociaciones, sobre todo en el interés de la población civil que en un conflicto -por más justo que sea y por más que se intentara respetar el derecho humanitario-, es inevitable que sufra y en conflictos internos, eso es particularmente duro y amargo para la población civil.
Hay mucha gente que cree que ha sido importante y necesario el esfuerzo militar para llevar la situación a un punto donde sea más probable el éxito de las negociaciones, pero también hay mucha gente que está convencida que para terminar definitivamente la violencia hace falta una negociación, que la última milla, si así se quiere decir, no podrá ser resuelta por la fuerza sino por un dialogo.
El Gobierno del presidente (Álvaro) Uribe nunca se ha negado, en absoluto, a un diálogo. Ha privilegiado el esfuerzo militar, pero ha dejado esta puerta abierta. No se ha dado con este Gobierno una negociación con las FARC. Con el ELN se dio en un proceso que Suiza acompañó en 2006 y 2007 y se llegó a un acuerdo tentativo que finalmente, lamentablemente, no fue aprobado por el ELN. Pero eso demuestra que el Gobierno actual no está, de manera categórica, opuesto a las negociaciones.
swissinfo.ch: A su parecer, ¿cuál es el papel de la sociedad civil?
D.P.: La sociedad civil tiene un papel muy importante como en toda democracia desarrollada, de controlar a los actores políticos elegidos, en el Parlamento, el Gobierno, y de reclamarles los compromisos contraídos durante las elecciones o que han tomado, por ejemplo, con este acuerdo fundamental, para la defensa de los derechos humanos en un país como Colombia, que todavía vive situaciones de violencia y de violación de esos derechos.
swissinfo.ch: ¿Cuál es el estado de las relaciones entre Suiza y Colombia?
D.P.: Las relaciones son muy buenas, creo que tenemos con muy pocos países relaciones tan completas e intensas. Colombia es uno de los siete países de concentración de la cooperación económica de Suiza a través de la Secretaría de Estado de Economía, con un programa de 10 millones de dólares por año.
La Agencia Suiza para el desarrollo y la Cooperación (COSUDE) desarrolla un programa por 9 millones este 2010, y Colombia también es un país de concentración de nuestro trabajo para la paz. En total nuestra cooperación con Colombia se suma a unos 20 millones de dólares al año.
En los últimos dos años vinieron dos consejeros federales, después de muchos años de que no hubo visitas, se produjo la conclusión del TLC -que espera la ratificación por Colombia-, tenemos también un acuerdo para evitar la doble tributación, resumiendo: las relaciones son intensas tanto en lo político como en lo económico y en el campo de la promoción de los derecho humanos.
Marcela Águila Rubín, de vuelta de Bogotá, swissinfo.ch,
El gobierno suizo cuenta en Colombia con la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación – COSUDE – Ayuda Humanitaria – desde comienzos del año 2001.
Mediante un programa de Ayuda Humanitaria la agencia establece alianzas con autoridades gubernamentales y con organismos no gubernamentales, tanto del orden internacional como en los niveles nacional y local. Se realizan sinergias y se compromete la mayor capacidad posible de esfuerzos institucionales y de las comunidades para lograr los objetivos comunes. Las líneas de intervención que se trabajan son: prevención, emergencia, rehabilitación e incidencia (advocacy).
La oficina de coordinación de COSUDE en Colombia funciona en las instalaciones de la Embajada de Suiza en Bogotá. Esto con el fin de crear sinergia y coordinar mejor los esfuerzos realizados por la Embajada de Suiza, por una parte en el ámbito del ofrecimiento de sus buenos oficios en gestiones de negociaciones de paz y proyectos de dimensión humana, y por otra parte a través de los proyectos apoyados por COSUDE en el campo de la Ayuda Humanitaria.
Presidente-vicepresidente
Alianza Social Afrocolombiana ‘ASA’
Jaime Araujo Rentería -Natividad Pérez Coello.
Movimiento la Voz de la Consciencia
Robinson Devia González -Olga lucía Taborda C.
Parido Liberal Colombiano
Rafael Pardo – Aníbal Gaviria Correa
Partido Cambio Radical
German Vargas Lleras – Elsa Margarita Noguera
Polo Democrático Alternativo
Gustavo Pietro – Clara López Obregón
Movimiento Apertura Liberal
Jairo Calderón – Jobanny Burbano
Partido Conservador Colombiano
Noemí Sanín – Luis Ernesto Mejía
Partido Verde
Antanas Mockus – Sergio Fajardo
Partido social de Unidad Nacional
Juan Manuel Santos -Angelino Garzón
Fuente: Registraduría Nacional del Estado Civil
República de Colombia
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