La justicia belga rechaza todas las acciones contra la Cienciología
La justicia belga rechazó este viernes todas las acciones legales contra la controvertida Iglesia de la Cienciología, considerada como una secta en varios países y que se exponía a ser disuelta.
Once miembros de esta iglesia surgida en Estados Unidos y dos asociaciones vinculadas a la organización estaban acusados de fraude, extorsión, organización criminal, violación de la vida privada y práctica ilegal de la medicina.
“El conjunto del procedimiento es improcedente por la grave e irremediable vulneración de un derecho a un juicio justo”, declaró el presidente del Tribunal Correccional de Bruselas, el juez Yves Regimont.
Regimont criticó en el fallo que esta investigación de 18 años contra la Cienciología en Bélgica se basó en “prejuicios”, así como las acusaciones de la fiscalía. “El tribunal debe juzgar los hechos por los que se recurre a él, pero si los acusados fueron enjuiciados, es primero porque son adeptos de la Cienciología”, agregó el juez. “Este prejuicio obliga a los acusados a defender primero la doctrina a la que adhieren” y por ello “fueron la mayoría del tiempo presuntos culpables”, lo que no les permitió tener un juicio justo, explicó.
En sus conclusiones, el juez fustigó como “incompletas” las conclusiones de la fiscalía ya que no aportaban la prueba de que se habían cometido infracciones.
La fiscalía había pedido, al cabo de un juicio de siete semanas que terminó en diciembre, disolver en Bélgica a esta organización, cuya matriz está en Los Ángeles, en Estados Unidos, y tiene entre sus adeptos a los actores Tom Cruise y John Travolta.
La organización recibió muchas críticas de personas que consideran que es una secta, pero sus fieles defienden que les otorga el apoyo espiritual para enfrentar la agitada y cambiante sociedad actual.
La cienciología fue fundada en 1954 por el escritor de ciencia ficción L. Ron Hubbard. Está reconocida como una religión en Estados Unidos y en países europeos como Italia, España, Holanda y Suecia.
El proceso había comenzado el 23 de octubre pero sin la participación de los demandantes originales, que retiraron los cargos tras llegar a un acuerdo con los acusados.
Sin embargo, el ministerio público prosiguió con el proceso y pidió penas de entre seis y 20 meses de prisión para los 11 acusados.
Desde el inicio del proceso, los representantes de la iglesia en Bélgica cuestionaron la validez de la investigación.
La primera investigación contra la cienciología en Bélgica había sido abierta en 1997 cuando varios antiguos adeptos, entre ellos una mujer que buscaba recuperar parte del dinero que había donado a la institución, acudieron a la justicia.
En el marco de las pesquisas, los investigadores encontraron información sobre los perfiles psicológicos de sus miembros y datos sobre su estado de salud.
En 2008, una segunda investigación fue abierta para aclarar acusaciones de que la institución había publicado falsas ofertas de empleo para captar nuevos miembros.
