Perspectivas suizas en 10 idiomas

Axpo prescinde del uranio ruso de Majak

La central suiza de Beznau no recibirá más combustible nuclear de Mayak. axpo.ch

Una de las mayores compañías energéticas de Suiza, Axpo, acaba de anunciar que suspende la importación de uranio desde la controvertida planta procesadora de Mayak, en Rusia.

La planta se encuentra en los Urales, en la frontera que separa Asia de Europa, y ha estado durante largo tiempo en la mira de grupos de activistas medioambientales como Greenpeace. Una devastadora explosión tuvo lugar en Mayak en los años 50 y, aunque sus consecuencias fueron silenciadas, Greenpeace afirma que la contaminación nuclear persiste.

El uranio reprocesado es el combustible utilizado por la central nuclear de Beznau, en el norte de Suiza. Axpo compensará la carencia de material importado de Mayak con nuevas importaciones desde Seversk, en Siberia. Pero Greenpeace ha expresado igualmente serias reservas acerca de Seversk.

El futuro de las importaciones desde Mayak ha estado en tela de juicio desde junio, cuando una visita planeada por altos ejecutivos de Axpo fue anulada a última hora con el argumento de que la planta se encuentra dentro de un perímetro reservado para usos militares.

De hecho, Axpo no ha podido aún inspeccionar el sitio, y el sábado pasado (13.11.) anunció que iba a “prescindir del uranio de Mayak hasta que se restableciera la transparencia necesaria”.

Línea de abastecimiento

El uranio no llega directamente desde las plantas rusas hasta Suiza. “Axpo tiene un contrato con el grupo energético francés Areva, quien a su vez obtiene el uranio en una planta enriquecedora en la ciudad de Electrostal, cuyas fuentes provienen de diversas centrales de producción en Rusia”, según explicó a swissinfo.ch Rainer Meier, portavoz de Axpo.

“A partir de ahora vamos a establecer nuevos acuerdos con Areva, en los que se nos garantice que nuestro combustible es preparado sin productos basados en uranio extraído de Mayak”, afirmó. Meier hizo notables esfuerzos para rechazar la idea de que el anuncio hecho por Axpo no era más que un ejercicio de relaciones públicas, surgido como reacción a las serias críticas relacionadas con la planta de Mayak. El portavoz quiso dejar muy claro que Axpo siempre se ha tomado las cuestiones medioambientales con la máxima seriedad posible.

¿Quién es el siguiente?

Patricia Marie, responsable de los servicios de prensa de Areva, comentó a swissinfo.ch que hasta el momento Axpo es el único cliente que ha decidido prescindir del uranio de Mayak. De hecho Alpiq, la empresa suiza que provee de uranio a la central nuclear de Gösgen, no ha seguido el ejemplo.

“Veremos si otros clientes siguen el ejemplo. Pero esta es una decisión de Axpo que ha puesto el listón de las exigencias en términos de transparencia muy altos”, afirmó Marie. Tan es así que Florian Kasser, activista antinuclear de Greenpeace Suiza, explicó a swissinfo.ch que la sección suiza de la organización pudo ejercer presión sobre Axpo precisamente debido a que la compañía se toma muy en serio sus credenciales medioambientales. Pero Kasser cree que esto no es el final del caso.

“La decisión de Axpo envía un mensaje claro, y no solo a escala de Suiza”, afirmó el activista. “El hecho es que las centrales nucleares se preocuparán en el futuro cada vez más por conocer el origen de sus combustibles”.

Greenpeace

Axpo mantiene un dialogo fluido con Greenpeace y ha hecho llegar muchas de las preguntas de la organización ecologista a Rosatom, la agencia estatal rusa que se ocupa de las cuestiones de energía nuclear.

Igualmente, el grupo ha mandado analizar muestras de agua del río Techa, supuestamente contaminado y cercano a Mayak, que les hizo llegar Greenpeace. Kasser valora la suspensión de importaciones de uranio de Mayak como “un paso en la dirección correcta”.

“Pero Axpo afirma que va a incrementar las importaciones de uranio desde Seversk. Y esta es una medida que ahora no podemos comprender, dado que los problemas medioambientales alrededor de Seversk son comparables a los de Mayak”, anotó Florian Kasser.

La mayor preocupación relacionada con Seversk es que los desechos radiactivos son inyectados directamente en la tierra. Pero esta forma de disponer de la basura nuclear es considerada “absolutamente impensable” en Occidente. “Hay una total discrepancia entre los objetivos medioambientales de Axpo y las prácticas que se llevan a cabo habitualmente en Seversk”, sostuvo Kasser.

Rosatom

Pero Axpo no solo mantiene el diálogo con Greenpeace, sino que también habla con Rosatom. Meier describió la actitud de los directivos de esta empresa como “de mente abierta y estilo occidental”. Pero al mismo tiempo que Kasser acepta que Rosatom ha abandonado el “secretismo” de la era soviética, se muestra poco convencido de que sea una empresa totalmente abierta y transparente.

“Vemos en nuestras conversaciones con Axpo que Rosatom ha intentado proporcionar información acerca de sus actividades; pero solo es una ínfima parte de los datos solicitados, y a menudo con la condición de que no sean hechos públicos”, explicó Kasser.

Sin embargo, Marie, portavoz de Areva, tiene una idea bastante diferente de lo que pasa en Mayak. Aseguró a swissinfo.ch que la compañía ha podido enviar a sus propios inspectores a las áreas del sitio que no están cerrados por razones militares.

“Tenemos unos códigos de conducta, y no compramos en cualquier parte sin comprobaciones. Los resultados de los análisis que hemos llevado a cabo son totalmente satisfactorios, por lo cual no hay razones para no seguir trabajando con Mayak”.

El Grupo Axpo es el líder de los servicios energéticos en Suiza. Emplea a más de 4.000 trabajadores.

Junto a sus socios, provee de electricidad a más de 3 millones de personas en Suiza.
 
Su objetivo es garantizar “un servicio fiable de electricidad a partir de fuentes que toman en cuenta el medio ambiente, y a precios competitivos”.

Utiliza una mezcla de energía nuclear, hidroeléctrica y nuevas energías. Axpo es propietaria de las dos centrales nucleares de Beznau y posee intereses en otras dos, las de Gösgen y Leibstadt.

También tiene opciones de compra en centrales nucleares de Francia.

El complejo de Mayak es el mayor centro nuclear del mundo. Se encuentra a 1.400 kilómetros al este de Moscú, en los Urales, que son la frontera entre Asia y Europa.

La explosión en 1957 de un tanque de almacenamiento conteniendo líquidos altamente radiactivos contaminó toda la región.


El mayor accidente radiactivo de Rusia hasta Chernóbil, en 1986, fue ocultado durante 30 años.

Un año después de la explosión, 1.000 km2 fueron declarados zona cerrada y sus habitantes reinstalados en otras regiones.

Pero Greenpeace mantiene que muchos nunca fueron realmente evacuados y que la zona “sigue siendo una de las más contaminadas por radiactividad del mundo”.

Durante años, los residuos radiactivos fueron echados directamente al río Techa, que provee de agua potable a más de 100.000 personas.

(Traducción: Rodrigo Carrizo Couto)

En cumplimiento de los estándares JTI

Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI

Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.

Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.

SWI swissinfo.ch - unidad empresarial de la sociedad suiza de radio y televisión SRG SSR

SWI swissinfo.ch - unidad empresarial de la sociedad suiza de radio y televisión SRG SSR