El bosque ocupa un papel central en sus primeras obras en prosa.
Ostkruez
Calw, localidad natal en la Selva Negra.
Ostkreuz
A los 15 años, Hesse se fuga del internado. Como castigo permanece encerrado en una cava. Aquí escribe el poema ‘Der Karzer’ (La cárcel).
Ostkreuz
Hesse ingresa en el seminario del monasterio evangélico de Maulbronn, del que se fuga.
Ostkreuz
Inicia un aprendizaje en Tübingen y funda el círculo literario Le Petit Cenacle.
Ostkreuz
Pasa varios años de su infancia en Basilea.
Ostkreuz
En 1903, se enamora en Florencia de MariaBernoulli, que luego se convertirá en su primera esposa.
Ostkreuz
El matrimonio Hesse vive unos años en Gaienhofen, a orillas del lago de Costanza (Baden-Würtemberg).
Ostkreuz
Para Hesse, Buda encarna al ser humano perfecto que siente el destello divino.
Ostkreuz
A menudo, el escritor rehúye a su familia y se refugia en Venecia.
Ostkreuz
Los viajes en tren desesperan a su esposa; tanto que tira el equipaje por la ventana.
Ostkreuz
En Zúrich aprende a bailar fox-trot y boston. Durante el carnaval, sale a la calle para mezclarse con la gente.
Ostkreuz
En 1919 se separa de su familia y se muda a Montagnola, en el cantón del Tesino. Aquí vivirá hasta su muerte en 1962.
Ostkreuz
La terraza del Hotel Bellevue-Bellavista, donde suele hospedar a sus amigos.
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Zúrich es la ciudad del lobo estepario y sede de la editorial que publica El juego de los abalorios en 1943.
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Hermann Hesse fallece en 1962. Está enterrado en Montagnola.
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Medio siglo después de su desaparición, sigue siendo uno de los novelistas más leídos. La fotógrafa Ute Mahler recorrió los lugares que marcaron la vida y obra del escritor, al que le encantaba viajar.
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Además de escribir, Hermann Hesse pintaba. Era un hombre que buscaba y se cuestionaba; dos rasgos predominantes de su personalidad. A lo largo de su vida, recibió miles de cartas de sus lectores en todos los rincones del mundo a los que solía contestar. (FOTOS: Ute Mahler, Ostkreuz).
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Los años suizos del lobo estepario
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