Al menos 30 civiles murieron en mayo en ataques estadounidenses contra supuestos laboratorios de droga de los talibanes en el oeste de Afganistán, según un informe de Naciones Unidas publicado el miércoles y cuestionado por el ejército estadounidense.

La misión de la ONU para Afganistán (UNAMA) ha "verificado 39 casos de víctimas (30 muertos, cinco heridos y cuatro indeterminados), incluidos 14 niños y una mujer, en los ataques del 5 de mayo".

El ejército estadounidense, que llevó a cabo operaciones contra más de 60 sitios de producción de droga ese día, puso en duda las conclusiones de la ONU y desmintió el miércoles en un comunicado que hubiera alcanzado a civiles.