Escaramuzas en el Líbano tras ataque de los pro-Hezbolá
Varios enfrentamientos empañaron el lunes por la noche una serie de concentraciones organizadas por los manifestantes, determinados a continuar con su revuelta pese a los ataques de partidarios de los partidos chiitas Hezbolá y Amal.
En un país al borde del colapso económico, el levantamiento popular sin precedentes que exige la dimisión de los dirigentes, a quienes consideran corruptos e incompetentes, entra en su 40º día.
Desde su estallido el 17 de octubre ha habido enfrentamientos esporádicos entre los manifestantes y los partidarios de Amal y del Hezbolá pero ninguno tan violento como los del domingo por la noche.
El lunes por la noche, los simpatizantes de los dos partidos se acercaron nuevamente en motocicleta a la Plaza de los Mártires, epicentro de las protestas en Beirut, custodiada por la policía. Blandiendo retratos de Nabih Berri (líder de Amal) arrojaron piedras a las tiendas de campaña de los manifestantes, coreando “chiitas, chiitas” antes de irse, constató un corresponsal de la AFP.
Más tarde, se escucharon disparos en el barrio de Cola al paso de un convoy de motos, informaron las televisiones locales. Las fuerzas de seguridad cerraron el tráfico, según la agencia de información nacional ANI.
En otro barrio, el ejército se desplegó para separar a los partidarios de los dos partidos chiitas y los del Movimiento del Futuro, del primer ministro dimisionario Saad Hariri, según ANI.
En Tiro, una ciudad del sur y bastión del Hezbolá y de Amal, los atacantes prendieron fuego a las tiendas de campaña de los manifestantes en una plaza, según las televisiones locales.
Anteriormente el Consejo de Seguridad de la ONU llamó el lunes a preservar el “carácter pacífico de las manifestaciones” en Líbano.
Por la noche, cientos de simpatizantes del Hezbolá y de Amal se manifestaron en los suburbios del sur de Beirut, para denunciar un accidente ocurrido al amanecer en el que murieron un hombre y una mujer cuyo automóvil chocó con una barrera en la carretera instalada, según las dos formaciones chiítas, por manifestantes antigubernamentales.
Los manifestantes lo negaron y publicaron en las redes sociales un mapa con las posiciones de sus barricadas.
