La decisión de EEUU sobre las colonias, celebrada por israelíes y condenada por palestinos
La decisión de Estados Unidos de dejar de considerar la colonización israelí contraria al derecho internacional fue recibida como una victoria por Israel y como un fuerte golpe por los palestinos, lo cual dividió aún más a los protagonistas de un conflicto sin salida a corto plazo.
La clase política israelí, una gran parte de la prensa y los habitantes de colonias israelíes celebraban este martes tras el anuncio de la administración de Donald Trump sobre las colonias en Territorios palestinos ocupados.
Esta decisión “refleja una verdad histórica -que los judíos no son colonizadores extranjeros en Judea y Samaria (nombre bíblico usado en Israel para designar a Cisjordania ocupada)”, declaró el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
Tras haber reconocido a Jerusalén como capital de Israel y parte de los Altos del Golán sirio como israelí, la Casa Blanca considera ahora que las colonias israelíes en territorios palestinos “no son contrarios al derecho internacional”.
Washington cambia así no solo su política sino que nada a contracorriente de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, como la 2334, que consideran las colonias como una “violación del derecho internacional humanitario” y compromete la viabilidad de la solución de dos Estados.
Aunque la colonización por parte de Israel de Cisjordania y de Jerusalén se ha mantenido bajo todos los gobiernos israelíes desde 1967, en los últimos años se ha acelerado con el impulso de Netanyahu y su aliado Trump.
Actualmente, más de 600.000 israelíes coexisten conflictivamente con unos tres millones de palestinos en Cisjordania y Jerusalén Este, la parte palestina de la ciudad ocupada y anexionada por Israel.
“A pesar de la alegría que esta decisión suscita en Israel, esta importante decisión es ante todo simbólica y no será seguramente seguida por el resto de la comunidad internacional”, escribe el martes el gran diario israelí Yediot Aharonot.
“Dicho esto, esta decisión podría ser entendida por Israel como una luz verde para seguir la expansión de las colonias y avanzar con su proyecto de anexión”, agregó.
Netanyahu había prometido en septiembre anexar rápidamente el Valle del Jordán, territorio estratégico que representa alrededor del 30% de Cisjordania ocupada, si seguía en el poder.
El anuncio de Washington ocurre justo cuando el rival de Netanyahu, el ex jefe del ejército Benny Gantz, también favorable a la larga con la anexión del Valle del Jordán, tiene hasta miércoles para intentar formar un gobierno.
Para formar un gobierno sin el apoyo de Netanyahu, Gantz debe contar como mínimo con el apoyo de diputados árabes. Si bien elogió el “apoyo sólido” de Washington, los partidos árabes israelíes lo condenaron.
– Amargura en Ramala –
Los responsables palestinos condenaron la decisión del gobierno de Trump que espera además la formación de un nuevo gobierno en Israel para anunciar su proyecto de paz para Medio Oriente.
“Hemos comenzado conversaciones en la ONU para presentar un proyecto de resolución al Consejo de Seguridad. Esperamos un veto de Washington, pero vamos a seguir adelante”, declaró el martes el jefe negociador de los palestinos, Saeb Erekat.
En una conferencia de prensa en Ramala, sede de la Autoridad Palestina, Erekat añadió: Estados Unidos “quiere vernos de rodillas… pero vamos a mantenernos de pie”.
El anuncio de Washington “confirma” que la administración Trump “es una amenaza para la paz internacional porque es cómplice de los crímenes de Israel”, comentó Hanane Achraoui, dirigente de la Organización para la Liberación de Palestina.
Para Ofer Zalzberg, analista de International Crisis Group, los palestinos, los países árabes y los europeos “pierden la fe” en Estados Unidos como “mediador” del conflito israelo-palestino.
“La administración Trump intenta destruir el consenso internacional (sobre las colonias). Pero eso no debería cambiar la situación sobre el terreno”, agregó.
