Marine Le Pen no se reunirá con “nadie del equipo” de Trump en Nueva York
La candidata presidencial francesa de extrema derecha Marine Le Pen visitó este jueves la Torre Trump en Nueva York, pero no se reunirá con ninguna persona del equipo de Donald Trump, informó una portavoz del futuro presidente de EEUU.
La presidenta del Frente Nacional (FN) tomó café con tres hombres de traje y corbata en una mesa del Trump Ice Cream Parlor, situado en la planta baja de la torre.
Uno de ellos era su pareja y vicepresidente del FN, Louis Aliot, y otro el empresario italiano George Guido Lombardi, vecino del presidente electo en la Torre Trump -ocupa los pisos 62 y 63-, y su contacto con la extrema derecha europea, aunque no integra su equipo oficial.
La candidata se negó a responder sobre si se reuniría con Donald Trump, pese a la insistencia de los periodistas. Le Pen no anunció su visita a Nueva York: su director de campaña dijo en París que se trataba de una visita “privada” y no dio ningún detalle sobre su agenda.
“No se reunirá con nadie de nuestro equipo”, dijo la portavoz Hope Hicks a los periodistas. Consultado también sobre una posible reunión Le Pen-Trump, el principal portavoz del presidente electo, Sean Spicer, había anunciado un poco antes: “No hay reuniones. Es un edificio público”.
Le Pen, que se autodenomina “anti-establishment” porque rechaza ideas de la izquierda pero también de la derecha, fue uno de los primeros políticos en felicitar a Trump por su victoria electoral, el 8 de noviembre.
También lo felicitó cuando dijo haber persuadido a Ford para producir uno de sus modelos de automóviles en Estados Unidos en lugar de en México, aunque el fabricante afirma que su decisión se basó puramente en razones financieras.
Las encuestas en Francia prevén que Le Pen, que perdió las presidenciales francesas de 2012, llegará al balotaje de las elecciones presidenciales de mayo, en las que se elegirá al sucesor del socialista François Hollande.
La Torre Trump, un edificio con muchos negocios, sigue abierta al público, aunque se han instalado fuertes medidas de seguridad en los accesos tras el triunfo del magnate.
