Al menos 9 muertos y 10 heridos mientras continúa la violencia en el noreste de la India
Nueva Delhi, 14 jun (EFE).- Al menos nueve personas murieron y otras diez resultaron heridas en el último suceso relacionado con la ola de violencia étnica que envuelve desde hace más de un mes el estado de Manipur, en el noreste de la India, afirmó a EFE este miércoles una fuente policial.
El conflicto entre el grupo tribal kuki, concentrado en las áreas montañosas del estado nororiental, y el étnico meitei, mayoritario en las zonas bajas, comenzó a principios del pasado mayo y desde entonces se ha cobrado la vida de casi un centenar de personas y obligado a desplazarse a más de 50.000.
Según el superintendente adjunto de Imphal Este, Kh. Herojit, el suceso se produjo en la noche del martes en el poblado de Khamenlok, situado en el distrito de Kangpokpi.
«Según la información de los equipos sobre el terreno, un grupo de supuestos insurgentes kuki dispararon contra varios voluntarios meitei, tras lo que las represalias de la comunidad meitei dejaron varios heridos», afirmó Herojit.
Según fuentes oficiales indias, más de 50.000 personas de ambas comunidades se han visto desplazadas por la ola de violencia étnica.
Los enfrentamientos comenzaron a principios del pasado mayo tras una manifestación de las comunidades minoritarias en contra de una petición del Tribunal Superior de Manipur a las autoridades del estado a incluir al grupo étnico meitei en su lista de tribus desfavorecidas.
Esta medida que otorgaría beneficios para acceder a empleos públicos o a la educación a los miembros de esta comunidad mayoritaria en Manipur, predominantemente hindú, enfureció al resto de tribus minoritarias, entre ellos los kukis, de mayoría cristiana.
El ministro del Interior indio, Amit Shah, se desplazó a Manipur a finales de mayo para reunirse con las autoridades y con los líderes comunitarios, donde instó a los civiles a entregar las miles de armas que habían sido extraídas de comisarías y del arsenal estatal.
En un intento de alcanzar el cese de las hostilidades, el Gobierno constituyó un comité de paz que incluye a representantes de los diferentes grupos étnicos del estado, además de ministros y personalidades regionales.
Sin embargo, tanto los kukis como los meitei han criticado la composición del organismo entre acusaciones de intento de limpieza étnica y llamados a un estado independiente.
El Kuki Inpi Manipur (KIM), una organización de la minoría tribal, criticó el pasado lunes que se hubiese incluido en el comité al jefe de Gobierno del estado, Biren Singh, al «haber perdido toda su credibilidad» y llamó a un proceso de mediación dirigido directamente por el Ministerio del Interior indio.
Grupos meitei y el Gobierno regional, por su parte, han acusado a grupos insurgentes kuki de avivar los combates. EFE
daa/igr/alf
© EFE 2023. Está expresamente prohibida la redistribución y la redifusión de todo o parte de los contenidos de los servicios de Efe, sin previo y expreso consentimiento de la Agencia EFE S.A.