Argentina: dos meses sin señales de la joven suiza
Anna Würgler y Mathías Villiger, una joven pareja de biólogos suizos, emprendieron hace un año un viaje desde Europa a Sudamérica.
Lo que venía siendo una hermosa experiencia compartida se convirtió en una pesadilla cuando, a finales de agosto, la muchacha de 28 años desapareció repentinamente.
La desaparición de Anna tiene expectantes a muchos. Desde la Embajada de Suiza en Buenos Aires se iniciaron gestiones para radicar la denuncia correspondiente, y también se difundió por los medios de prensa un comunicado solicitando a la población datos sobre su paradero.
El tema preocupa tanto a las autoridades de Berna (conocedoras del asunto, aunque debido a las leyes helvéticas no pueden brindar información a los medios) como a los habitantes del norte argentino, donde su novio ha emprendido la titánica tarea de buscarla, con, apenas, una foto de ella en mano y muy pocos datos.
swissinfo conversó durante más de dos horas, vía telefónica y por chat, con Mathías Villiger, de 31 años –su pareja y compañero de ruta en esta travesía-, quien relató todos los detalles del viaje que realizaban y todas las pistas -aún efímeras- que pudo reunir para intentar reconstruir los pasos seguidos por su novia desde su desaparición.
Crónica del viaje: de Europa a Sudamérica
“Empezamos en Génova, Italia, a fines de octubre del año pasado, donde embarcamos en una nave de carga, para llegar un mes después a Chile”, explica Mathías, y prosigue, intentando reconstruir el itinerario del viaje:
“Desde allí salimos pedaleando hacia el Sur del país hasta que cruzamos a la Argentina, por Santa Cruz. Allí hicimos una vuelta a la Patagonia en bus, y dejamos las bicicletas por 5 semanas en la casa de un amigo”
La travesía fue intensa, según relata el joven, y durante el viaje bifurcaron sus caminos en dos oportunidades.
La primera vez fue luego de recorrer gran parte de la Argentina, llegando a Buenos Aires, cuando Anna se dirigió a Brasil a trabajar en su investigación sobre el tema de termitas en la Universidad de Río Claro, en San Pablo, y él partió en bicicleta a recorrer Uruguay y Paraguay.
“Te sigo contando“, dice en perfecto español Mathías, y relata: “Al cabo de dos meses, más o menos, nos juntamos otra vez en el Paraguay para continuar hacia el Pantanal (Brasil), junto a la frontera con Bolivia, desde donde ella se fue para la provincia argentina de Jujuy, y yo continué por el Brasil”
El supuesto trayecto y las últimas señales de la joven
“Ella estaba viajando sola y en ‘bici’ en el norte de Argentina por un mes, sin problema. Se comunicó regularmente conmigo, sus padres y amigos, hasta el 26 de agosto, cuando nos dejó la ultima noticia, indicando su trayecto supuesto…”
Según lo que Anna había contado vía email a su familia, amigos y novio, el trayecto comprendía ir por la provincia de San Juan, visitando el Valle de la Luna, los parques nacionales Talampaya y El Leoncito y la ciudad capital.
“Después pensaba ir a La Rioja o a Córdoba y de allá a Tucumán y a Salta, volviendo a Tucumán y yendo a Buenos Aires pasando por Santiago del Estero”, cuenta el joven helvético, y explica porqué demoró en alarmarlo la ausencia de correos electrónicos de su pareja:
“Las primeras tres semanas no me preocupé, porque pensaba que ella estaría cruzando una región alejada, sin acceso a Internet. En principio nos encontraríamos de nuevo en Suiza, porque ninguno de los dos sabíamos exactamente cuándo regresar. Por mi parte sería en diciembre, y ella todavía no sabia si iba pasar a Uruguay o no”
“A partir de la cuarta semana sin noticias pensé que algo había pasado, y todos nos mandamos mensajes urgentes para obtener alguna noticia… A partir de la quinta semana, ya preparé el viaje a Argentina”
En el último tiempo Mathías estaba trabajando de voluntario en una granja orgánica de Brasil, que produce legumbres. Contó que se había comunicado con Anna todo el tiempo, cada semana o diez días vía email, y ella se contactaba habitualmente con sus padres y amigos por este medio.
Aunque éste era el primer viaje largo que emprendían juntos, la pareja tenía una relación formal de tres años: “Yo soy nacido en Saint Gallen y Anna es de Solothurn, pero durante los dos últimos años ambos vivimos en Berna, aunque no juntos”.
Buscando a Anna
Mientras sigue las pistas desde San Juan, Mathías Villiger dice que trata de no desesperarse: “No sé lo que pasó y me salvo no imaginándome demasiadas cosas. Lo considero como un proyecto de búsqueda. La gente me dice que en la región de los parques todo es tranquilo, que no hay peligro, que no hay gente mala…”
“No tengo ninguna idea por qué paró de comunicarse, no hay razón obvia de callarse por dos meses. Si fuera que no se comunica conmigo únicamente, bueno, no estaría muy feliz, pero por lo menos sabríamos dónde está”
“La busco siguiendo el trayecto supuesto que ella nos dejó en la ultima noticia. No fui a la comisaría porque fue la Embajada la que se ocupó de esa parte. Sí fui al Consulado, a la policía de Salta, a las oficinas de turismo y estuve averiguando, mostrando una hoja con datos y la foto, preguntando…”
“Todavía tengo la táctica de buscar ‘a escala media’: creo que es temprano para pegar la foto en todos los lugares posibles…Espero encontrar alguna información en un lugar y después buscar más profundamente en ese lugar, tal vez con ayuda personal de Suiza”
Consternado, Mathías cuenta que se comunica con la familia de la joven y sus amigos casi todos los días: “Estoy tratando de calmarlos regularmente, pero ellos están esperando buenas noticias, sin poder hacer mucho”
Explica que lleva registrado cada paso anotado en un cuaderno que cuida con recelo. Sostiene que su pareja es prudente y desestima que haya ‘hecho dedo’, excepto en un caso excepcional:
“Si lo hizo, estoy seguro, fue en caso de emergencia únicamente. Por ejemplo, ella prefirió armar una carpa junto a una casa donde hay una señora (dueña)”, sostiene tratando de mostrar que Anna es precavida.
Las personas que puedan aportar alguna información sobre el paradero de Anna, pueden hacerlo dirigiéndose a: la Embajada de Suiza en Buenos Aires, al correo electrónico de Mathias Villiger: mathiasvilliger@yahoo.com, o a la policía provincial.
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swissinfo, Norma Dominguez, Buenos Aires
La bióloga Ana Würgler tiene 28 años y es originaria de Solothurn.
Su pareja, Mathias Villiger, es oriundo de Sankt Gallen. Ambos radican empero en Berna.
Hace un año emprendieron una larga travesía hacia América del Sur.
La desaparición de Ana tuvo lugar cuando recorría, según se presume, sola en bicicleta por la región norte de Argentina.
La Embajada de Suiza en Buenos Aires ha denunciado la desaparición a las autoridades argentinas.
Aunque no hay señales concretas sobre su paradero, Mathias Villiger y los parientes de la joven suiza siguen de cerca las pesquisas.
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