Aumenta la preocupación en los mercados por las sobrevaloraciones de la IA, según el BPI
Fráncfort (Alemania), 8 dic (EFE).- Aumenta la preocupación en los mercados por las sobrevaloraciones en bolsa de las tecnológicas estadounidenses, en concreto de las siete magníficas, que son Amazon, Alphabet, Apple, Meta, Microsoft, Nvidia y Tesla.
El Banco de Pagos Internacionales (BPI) dice en su informe trimestral de diciembre, publicado este lunes, que esta preocupación se manifiesta en un aumento de la volatilidad.
A finales de noviembre se produjo una caída en los precios de las acciones en todo el mundo dada la volatilidad pero las bolsas dan ganancias respecto a comienzos de septiembre.
El informe analiza qué ha ocurrido en los mercados financieros desde el 5 de septiembre y hasta el 28 de noviembre.
El BPI, cuya sede está en la ciudad suiza de Basilea y cuyo director general es el español Pablo Hernández de Cos, también ve diferencias respecto a las burbuja de las puntocom de finales de los años 90 del siglo pasado.
El rally en el precio de las acciones de las siete magníficas está impulsado por las expectativas optimistas respecto a la rentabilidad futura de la inversión en inteligencia artificial y en centros de datos y respecto al sólido crecimiento de sus beneficios.
Diferencias con la burbuja de las puntocom
Estas empresas han subido mucho en bolsa pero han dado resultados muy buenos a diferencia con las puntocom, cuyos beneficios no subieron de forma similar.
«Esto es diferente a la burbuja puntocom de finales de la década de 1990, que estuvo impulsada en gran medida por unas expectativas demasiado optimistas que no estuvieron respaldadas por un crecimiento de las ganancias realizadas», según el informe.
La pregunta es si las ganancias de las empresas de inteligencia artificial serán sostenibles y si están justificadas a largo plazo las ingentes inversiones en infraestructuras, especialmente en centros de datos.
El rally de las acciones de las siete magníficas ha creado preocupación debido al riesgo que una caída de su precio tendría para las bolsas y la economía.
Las siete magníficas concentran ahora el 35 % de la capitalización de mercado en el índice S&P 500, frente al 20 % en noviembre de 2022, según cifras del BPI.
Las acciones de las siete magníficas se han convertido en un eje para otras acciones tecnológicas estadounidenses, cuya cuota en la capitalización de mercado ha crecido hasta el 15 % desde el 10 %.
Por ello, el BPI advierte de que el aumento del peso de la industria tecnológica en la capitalización de mercado general «magnifica los riesgos de contagio» en caso de que los inversores dejen de ser tan optimistas respecto a su rentabilidad.
De momento, noticias decepcionantes sobre los beneficios de algunas empresas no han producido un contagio a todas las siete magníficas, ni al sector tecnológico.
Pero la volatilidad refleja al aumento de la preocupación sobre la rentabilidad de las ingentes inversiones en centros de datos y tecnologías relacionadas con la inteligencia artificial.
La rentabilidad de las tecnológicas así como de las acciones estadounidense, más en general, ha llevado flujos de capital a la renta variable de EEUU, sobre todo en el segmento de fondos cotizados.
Los inversores minoristas siguieron invirtiendo en fondos de renta variable de EEUU, mientras que los institucionales se retiraron gradualmente.
Las valoraciones de las siete magníficas se han disparado pero «todavía están muy por debajo de los niveles alcanzados en el pico de la burbuja puntocom», según el banco de los bancos centrales.
Las valoraciones de otras tecnológicas se acercan a los niveles del pico de la burbuja de las puntocom.
El vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, dijo recientemente que no hay una burbuja en la inteligencia artificial como la burbuja de las puntocom.
El hecho de que se pueda producir una corrección fuerte de los precios de las acciones no significa que haya una burbuja, según el vicepresidente del BCE.
De Guindos también consideró que existen diferencias respecto a lo que fue la burbuja puntocom a comienzos de este siglo porque ahora las empresas de inteligencia artificial tienen modelos de negocio muy claros, ingresos muy buenos y son muy rentables.
La Junta Europea de Riesgo Sistémico (JERS) advierte de que el rápido desarrollo de la inteligencia artificial puede crear inestabilidad financiera y considera ideal un acuerdo global para evitar su uso malicioso, algo similar al Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares. EFE
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