Dos equipos inusuales, uno formado por personalidades políticas y refugiados, y otro integrado por ex figuras del balompié suizo, animaron un interesante partido, en la capital suiza, para decir un "no" rotundo al racismo.

Auspiciado por la Organización suiza de Ayuda a los Refugiados y la Asociación de Fútbol de Suiza, el encuentro fue disputado en el estadio de Liebefeld, en Berna, bajo el lema de "luchar contra el recrudecimiento de la xenofobia en los estadios." La intención va, obviamente, más lejos de ese enunciado.

Jean-Daniel Gerber, director de la Oficina Federal de los Refugiados, Juerg Krummenacher, de la organización humanitaria Caritas y el diputado nacional, Claude Rey alinearon en el plantel de los refugiados en Suiza.

Al final del cotejo, las antiguas figuras del fútbol helvético, dirigidas por Koebi Kuhn, estrella indiscutible en las décadas 60 y 70, obtuvieron una apretada victoria por 3-2 goles.

Más allá del resultado y de la lluvia que perjudicó el trámite de las acciones, el original partido de fútbol logró su objetivo, es decir el de sensibilizar al público sobre el latente tema del racismo y la xenofobia.

La oportunidad del partido corresponde a la proximidad del 17 de junio, fecha dedicada al Día del Refugiado en Suiza.

swissinfo y agencias

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