Perspectivas suizas en 10 idiomas

“La verdadera belleza no envejece”

Nikolaus Linde en su consultorio de Zúrich. swissinfo.ch

Declarado enemigo de las arrugas y los senos caídos, el cirujano plástico Nikolaus Linde es el propietario de la "Brazil Clinic", una de las tantas clínicas de cirugía plástica estética que operan en un mercado millonario en Suiza. En entrevista con swissinfo.ch, Linde habla sobre los “milagros” del botox, la estética de la mujer brasileña y la obsesión por la belleza.

El consultorio está localizado en una zona rica de Zúrich, a dos kilómetros de la estación central de trenes. Una simpática empleada con el rostro bien maquillado recibe a los pacientes en la puerta y les conduce hasta una sala decorada con sofás modernos, una mesa de vidrio y una gran televisión plasma. Los tonos predominantes son verdes y blancos. Sobre la mesa se hallan revistas GQ con fotos de modelos y estrellas internacionales.  A los costados de la habitación, estantes con productos de belleza. La televisión exhibe videos de gente antes y después de las cirugías plásticas. En uno de ellos, una mujer portuguesa relata la felicidad que le causó la elevación de sus senos.

Nikolaus Linde es un médico alemán y sus actividades son intensas. Señala hacia un afiche donde está escrito su principal lema: “La verdadera belleza no envejece, sino que sigue desarrollándose”. Sus dos consultorios –el segundo está en Teufen, cerca de San Gall-  son visitados por una clientela, predominantemente femenina, interesada en diversos tratamientos de bellezas: lipoaspiraciones, aplicaciones de botox y cirugías plásticas.

swissinfo.ch: Usted se desempeña como cirujano plástico y abrió en Zúrich una clínica llamada “Brazil Clinic”. ¿Por qué esa referencia a Brasil?

Nikolaus Linde: Tengo una empleada que es brasileña, mulata. Como hablo muy mal otros idiomas me ayuda en la traducción.  Ella está bien integrada en la comunidad latina de Zúrich. Como siempre recomendaba mis servicios a las amigas tuvimos la idea de hacer algo más profesional y así surgió Brazil Clinic, creada para atender solicitudes especiales.

Según una encuesta reciente, basada en datos médicos independientes y realizada por la empresa Acredis, en 2012 fueron realizadas 50 mil cirugías plásticas estéticas en Suiza.

En el país trabajan entre 500 y 600 médicos especializados en cirugía plástica estética. Cerca de 200 están certificados por la Sociedad Suiza de Cirugía Plástica Reconstructiva y Estética (SGPRAC).

“Cirugía plástica”, “cirugía estética” o “cirugía cosmética” son denominaciones no protegidas en Suiza. Por eso la  SGPRAC solo certifica las operaciones que tienen una especialidad suplementaria de cirugía plástica y estética (FMH).

El volumen del mercado de la cirugía plástica en Suiza es evaluado en torno a los 500 millones de francos anuales.

Según el estudio de Acredis, algunos precios medios de operaciones en Suiza son:

– lipoaspiración: entre 4 mil y 8 mil francos suizos.

– aumento dos senos: 9 mil y 14 mil francos.

– corrección de nariz: 6 mil y 10 mil francos.

– reducción de senos: 10 mil y 14 mil francos.

swissinfo.ch: ¿Por qué la clínica se presenta como especializada en el tratamiento de personas de piel oscura?

N.L.: Cuantos más pigmentos oscuros, más complicado es el tejido de la piel de una mujer. El culto a la belleza es tan fuerte en Brasil no solo por el deseo de la gente de ser bonita, sino porque el cuerpo de esas mujeres más oscuras sufre mucho después del primer embarazo. La elasticidad de la piel no es muy buena, queda medio caída y los senos pierden su forma. Cuando realizamos una lipoaspiración hay más tejido conjuntivo dentro, o sea tejido duro, una de las causas por las cuales la piel no retorna a su estado original. Especialmente cuando las brasileñas tienen el primer hijo muchas veces se entristecen por las consecuencias del embarazo en su propio cuerpo.

swissinfo.ch: ¿En la cirugía plástica, cuál es la diferencia entre los deseos de las mujeres brasileñas y de las suizas?

N.L.: A las mujeres latinas les gusta más las correcciones quirúrgicas en partes especiales como los glúteos, los senos o el rostro. Las suizas, en cambio, no quieren que la gente perciba que fueron operadas. Las correcciones son bien discretas.

swissinfo.ch: ¿Por qué el cirujano plástico brasileño Ivo Pitanguy es tan conocido en el mundo de la cirugía estética?

N.L.: Pitanguy  es una especie de “Dios” de la estética. Prácticamente todas las técnicas quirúrgicas en esa rama fueron influidas por él. Su gran experiencia con víctimas de quemaduras, en la reconstrucción de tejidos, le permitió desarrollar muchas técnicas, que actualmente han sido obviamente modernizadas. Hace más o menos tres años lo encontré en un congreso en Mónaco. Era considerado como una gran estrella. Pero lo que realmente sorprende es su carácter humano, sus actividades en las favelas y las operaciones gratuitas a gente que ha sufrido mutilaciones.

Mostrar más

swissinfo.ch: ¿Las técnicas aplicadas en Europa difieren de aquéllas empleadas en otros continentes?

N.L.: En principio no existen diferencias. La diferencia está relacionada con la parte del cuerpo que se quiere mejorar. Puedo decir que en Suiza tenemos poca experiencia en aumentos de nalgas, senos o en la aplicación  de implantes, actividades que en Brasil forman parte de lo cotidiano.

Nació en Messkirch, Alemania, el 9 de abril de 1962.

Concluyó sus estudios en medicina en Alemania en 1989.

Especialidades: clínica general y  flebotomía (estudio de las venas y sus dolencias)

Trabaja desde 1997 en la  medicina estética.

En 1997 abrió su propio consultorio en San Gall.

Está casado y tiene dos hijos.

swissinfo.ch: ¿Cuál es la operación más frecuente que se realiza en su clínica?

N.L.: La lipoaspiración.

swissinfo.ch: ¿Se trata de mujeres que quieren ser más delgadas?

N.L.: No. En su mayoría son mujeres que quieren vestirse con ropitas de samba o que están preocupadas por el exceso de gordura en los laterales. En algunos casos es gente flaca, deportiva, pero con adiposidad en partes especiales entre las piernas.  Sueñan con ese ideal de belleza, el llamado “thigh gap”. En realidad, la propia musculatura define ese espacio, pero puede existir exceso de gordura en esas partes. Cuando practico la lipoaspiración, alguna de esas mujeres logra realmente tener piernas más largas. Pero si el problema es debido al exceso de peso, entonces explico que primero es necesario perderlo.

swissinfo.ch: ¿Existen casos en los cuales rechaza realizar una intervención médica?

N.L.: Sí. La cuestión fundamental es saber lo que los pacientes quieren realmente. O mejor dicho: cuáles son sus expectativas en relación conmigo y con mi técnica. Suelo decir que la principal complicación de la estética – y es esa la causa corriente de que paciente y médico se encuentren en los tribunales- es la decepción motivada, en gran medida, por las expectativas completamente irreales. Un ejemplo: una paciente con un vientre enorme, producto de la gordura localizada ente la musculatura y la piel y la gordura por detrás de la musculatura. Solamente la gordura localizada entre la piel y la musculatura puede ser sustraída. Eso significa que puedo practicar una lipoaspiración perfecta, pero la adiposidad detrás de la musculatura se mantendrá. Si recibo una paciente frustrada a causa de una lipoaspiración,  le explico que el trabajo fue perfecto pero es ella quien debe adelgazar.

swissinfo.ch: El diario SonntagsZeitung afirma que Suiza cuenta con el mayor consumo de botox per cápita del mundo. ¿Cuál es la razón?

N.L.: Suiza es un país pequeño pero de alto poder adquisitivo. Tal vez el consumo bruto de botox sea mucho más alto en Brasil, pero allá se concentra en los grandes centros urbanos. Aquí, incluso una mujer del interior del país puede pensar que la gente observa sus arrugas y pida algunas aplicaciones de botox. Es un tratamiento que no se considera caro.

swissinfo.ch: ¿Qué explica esa pasión de los suizos por el botox?

N.L.: Las brasileñas son divertidas: hablan todo abiertamente sobre la relación con los hombres o lo que hicieron a sus senos. Algunas traen otras amigas para operarse y conseguir un descuento. En Rusia las mujeres preguntan a otras mujeres: “Usted tiene treinta años y nunca se aplicó botox? En Suiza la situación es diferente: los pacientes en general llegan al consultorio porque están con cara de cansados, porque trabajan mucho o festejan demasiado. El botox es especial, porque en cinco minutos está hecha la aplicación y no se ve ningún rastro del tratamiento.

Las mujeres elogian mi trabajo y dicen que ni siquiera sus maridos se dan cuenta. Es el tipo de intervención que puede ser financiado por el presupuesto familiar sin complicaciones. Yo mismo, hace algunos años, antes de Navidad, me apliqué botox. Y fui al solárium, me apliqué botox una o dos veces y después fui a trabajar. Todos los pacientes me decían que parecía muy descansado.

swissinfo.ch: ¿Por qué las mujeres se esfuerzan tanto en parecer más jóvenes?

N.L.: Vivimos en una sociedad en la cual muchas mujeres de entre cincuenta y sesenta años están separadas y buscan un nuevo compañero. Piensan que una mejor apariencia mejora sus posibilidades. Luego de mi tratamiento, comparo las fotos y constato una enorme diferencia entre antes y después. En otros casos, con menos intervenciones y pocas diferencias visuales en las fotos,  se perciben grandes cambios mentales. Gente que irradia autoconfianza. Tal vez ese medio les da más seguridad en las entrevistas para buscar un empleo o en la vida sentimental.  ¡Doy fe de centenas de historias semejantes!

swissinfo.ch: ¿Cómo reacciona cuando la clienta es una adolescente que se percibe a sí misma como fea y sueña con tener otra apariencia?

N.L.: Algunos de esos casos son dramáticos. Una de mis pacientes era una joven que correspondía perfectamente a los patrones actuales de belleza. Pero que se sentía la mujer más fea del mundo. Fue necesario que hablara incluso con su madre. Son casos extremos como la anorexia o la preocupación obsesiva con algún defecto en la apariencia física. Esas personas van al médico en busca de una solución. En algunos casos le digo a la paciente que debe parar con eso y que su rostro es bonito.  A veces son personas que no tienen nadie que pueda observarlas  y entonces me agradecen por mi constatación. La cuestión es que yo no soy psiquiatra. Si les digo que se trata de un problema psicológico, entonces van a deprimirse y buscarán otros médicos. En algunos casos empleo la técnica de exagerar las eventuales complicaciones de esas operaciones para que abandonen sus ideas. Muchas terminan desistiendo.

swissinfo.ch: ¿En qué casos la operación plástica estética es realmente necesaria?

N.L.: Labios leporinos, orejas en abanico o, recuerdo también mujeres iraníes –país con record de operaciones de nariz- que tienen una nariz aguileña y sufren mucho por esto debido a los patrones estéticos del país. Por otra parte, existen personas con los labios deformados. Son casos que hasta  en nuestro sistema de salud se cubrirían los costos de la operación.

swissinfo.ch: ¿La gente se siente mejor después de ser operada?

N.L.: Existe un estudio realizado en Alemania que muestra que las operaciones hasta pueden tener un efecto antidepresivo. A largo plazo, los pacientes se sienten mejor. Pienso en el caso de una mujer casada, con dos hijos, que me pidió agrandar sus senos. Ahora tiene más autoconfianza. Viste otra ropa y se siente más mujer.

Traducción del portugués, S.Ferrari

En cumplimiento de los estándares JTI

Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI

Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.

Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.

SWI swissinfo.ch - unidad empresarial de la sociedad suiza de radio y televisión SRG SSR

SWI swissinfo.ch - unidad empresarial de la sociedad suiza de radio y televisión SRG SSR