Arte de ida y vuelta
El colectivo ‘Hispano Suiza’ propone una selección de obras realizadas por creadores españoles afincados en Suiza y artistas suizos residentes en España. El resultado de este encuentro de culturas puede verse en Zúrich hasta el 28 de octubre.
Nos encontramos a tiro de piedra de la concurrida estación de ferrocarril de la capital financiera de Suiza. Llegamos a una especie de vieja fábrica abandonada que responde al pragmático nombre de Sihlquai 55.
Tras subir unas escaleras, nos encontramos a Oliver Orest Tschirky, curador independiente con una amplia carrera a sus espaldas en la que destacan cargos en la feria Art Basel o el Museo de Arte de Berna, entre otros, da los últimos toques a su criatura: la exposición colectiva Hispano Suiza – un intercambio cultural dinámico e innovador entre España y Suiza.
El nombre de la muestra es, obviamente, un homenaje a los legendarios coches Hispano Suiza, marca creada por suizos y españoles en la Barcelona de 1904.
Una selección rigurosa
“La idea surgió hace un año. Quisimos presentar artistas españoles que viven y trabajan en nuestro país. Me entusiasmé en seguida con la idea, a condición de poder seleccionar las obras con el máximo rigor posible para tener una muestra de buena calidad”, comenta a swissinfo.ch el comisario Oliver Orest Tschirky.
La exposición, que cuenta con el apoyo del Consulado de España en Zúrich, propone al visitante piezas en diversos formatos: desde fotografía a videoarte pasando por pintura o la instalación con velas del catalán Muma, que ha realizado obras en Barcelona o para el Milenario de la ciudad de Neuchâtel.
“Hemos invitado a todos los artistas españoles que fuimos capaces de encontrar”, prosigue Oliver Tschirky en un impecable castellano. “Conozco bien la cultura y la creación españolas, y quise encontrar los puntos de unión entre ambas culturas y dar lugar a artistas binacionales, como Daniel Garbade, nacido en Zúrich pero de origen español”.
La palabra a los artistas
A medida que empiezan a llegar los visitantes, atraídos sin duda por el arte y quizás también por las excelentes tapas y vinos de España, vamos conociendo a los creadores. El primero en presentarse es Muma.
Según explica el comisario de la muestra, “sus acciones artísticas poéticas y efímeras hacen referencia a las esculturas sociales de Joseph Beuys”. Su trabajo “supone insinuaciones de las artistas concretas de Zúrich y de las diferencias culturales”.
El artista nacido en Barcelona está atareado haciendo un camino de gruesas velas en el suelo. Diseñada con tiralíneas, la obra es muy precisa en la anchura que representa. ¿Por qué?
“Mi obra es una metáfora de la diferencia cultural. Pues 23,3 centímetros es la diferencia entre el ancho de las vías europeas y la red ferroviaria española. Una diferencia pequeña, pero más que suficiente para mantenernos separados”, explica Muma.
Esta diferencia se origina a principios del siglo XX como medida de defensa. “El ancho de vías europeo es de 1.435 milímetros, mientras que el español es de 1.668. La línea férrea nos une, pero también nos separa”, comenta Muma con una sonrisa.
Poco después llama la atención del cronista un tríptico que recuerda una naturaleza muerta, obra de Daniel Garbade titulada Tríptico Caravaggio Still Reloaded de 2010. “Garbade trabaja mucho a partir de mitos y elementos de la herencia. En este caso es una suerte de variación sobre el tema del bodegón”, señala comisario Oliver Orest Tschirky.
Garbade nació en 1957 en Zúrich, y vivió desde 1983 hasta 2011 en Madrid. Actualmente reside en Zúrich. “Sus óleos y dibujos se basan por separado en mitos antiguos, héroes clásicos, en la condición humana y en partes de pinturas maestras antiguas”, según Orest Tschirky.
A ello se suman unas excelentes fotos blanco y negro de Luis Lumbreras. Una obra que recuerda una constelación de la española afincada en Ginebra Silvana Solivella, una videoinstalación realizada a partir de fotos familiares de inmigrantes de Adela Picón o un acrílico de Myriam Arnelas.
Otras obras son unas interesantes fotos tomadas en La Habana por Pablo Fernández Macho; dibujos en tinta china de Pierre Hausensak o una divertida videoinstalación de Nicole Herzog-Verrey.
Una suiza de Madrid
Nacida en Zúrich y madrileña de adopción, esta mujer es un ejemplo inmejorable del cruce de culturas entre Suiza y España.
“Llevo ya décadas en España y mis hijos son de allí. España es mi casa desde que llegamos con mi marido que trabajaba entonces como corresponsal en Madrid del diario Tages Anzeiger de Zúrich”, dice.
Herzog-Verrey estudió fotografía en la Escuela Politécnica de Central London y Bellas Artes en la Universidad Complutense de Madrid. “Su enfoque artístico va dirigido hacia la identidad y el género, la sostenibilidad y la ecología”, destaca el comisario.
La obra que presenta Nicole Herzog en esta exposición se titula Mon petit changement climatique (2011) está filmada en sus casas de Verbier y Madrid y muestra las consecuencias del cambio climático.
Antes de despedirse, el cronista vuelve a ver a Muma atareado poniendo en su lugar su instalación de grandes velas, a las que el público distraído a menudo da patadas al caminar, rompiendo la simetría.
“Dado que las autoridades no nos permiten encender las velas, la performance de esta noche consistirá en volver a poner las velas en su sitio”, dice el artista entre risas.
Adela Picón: nació en Melilla y vive en Berna. En su montaje de vídeo “¿Aquí o allí?” une fotos de recuerdo obtenidas de un álbum familiar perteneciente a un antiguo emigrante, cuestionando los prejuicios sobre los emigrantes.
Myriam Arnelas: nació en 1976 en Zug. La artista pinta sobre todo personas, la mayoría de ellas mujeres, y espacios. Su cuadro en acrílico plasmado conceptualmente muestra a una mujer joven autoconsciente situada en el borde del cuadro.
Pablo Fernández Macho: nació en 1974 en Santander. Es fotógrafo autodidacta y vive en Zúrich. Una serie de fotografías capturan espacios arquitectónicos fuertemente estructurados, jugando con el parecido entre composiciones abstracto-geométricas y concreto-constructivistas.
Silvana Solivella: nació en 1964 en Ginebra y vive en Lausana. Desarrolla su obra en base a cuestiones metafísicas, siendo sus temas centrales la luz, la continuidad y lo efímero. En su instalación con luz une todos esos aspectos, refiriéndose al mismo tiempo al significado del recuerdo y de la identidad.
Nuria García García: nació en 1968 en Salamanca. Vive en Zúrich. Partiendo de la observación de que un producto de diseño en una imagen publicitaria siempre produce un efecto perfecto e irreal, la artista ha desarrollado objetos que juegan con la percepción de la realidad.
Dil Toro: nació en 1970 en Barcelona. Es autodidacta y vive en Zúrich. De su serie de cuadros de gran formato extrae fascinantes secciones que asocia con citas de textos.
Luis Lumbreras: nació en 1969 en Arroyo del Ojanco y vive en Zúrich. Con sus retratos-fotografías en blanco y negro consigue plasmar imágenes de personas en posiciones chistosas, sin pretensión alguna de reírse de ellas o de herir su personalidad.
Carmen Lorente Sagrós: nació en Zaragoza y vive en Lucerna. Con sus composiciones abstractas reduce a la superficie tanto el espacio como la arquitectura.
Pelayo Fernández Arrizabalaga: nació en Laredo y vive en Zug. Pelayo es un artista de reputación mundial y músico de jazz electrónico. En la exposición presenta dibujos abstracto-geométricos como visualizaciones de sus composiciones.
Pierre Haubensak: nació en 1935 en Brünig-Hasliberg y vivió desde 1961 hasta 1969 en Ibiza. Su obra está influenciada por la pintura de Color Field y la de Hard Edge, así como por el minimalismo.
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