Daños invisibles y huracanes; psicodrama en Cuba
A su paso por Cuba el mes pasado, los ciclones Gustavo e Ike dejaron destrucciones masivas en la infraestructura física del país.
Poco se habla de las heridas psicológicas y los traumas que dejan los huracanes en la población. Ursula Hauser, psiquiatra suiza, y un equipo de especialistas cubanos, aportan ayuda a las victimas con el método del psicodrama.
Los dos ciclones destruyeron medio millón de casas y 250.000 personas quedaron sin hogar. Cuba perdió también cultivos, cientos de salas de cine y escuelas. De acuerdo con cifras oficiales, los daños materiales totalizan unos 5 mil millones de dólares. Los huracanes provocan daños en el cuerpo y el alma. Algunas víctimas de los huracanes requieren terapia psicológica.
Ursula Hauser, una psicoanalista suiza, ofrece cursos de maestría en psicodrama en la Facultad de Psicología de la Universidad de la Habana. Un grupo de egresados de este programa relacionado con el Centro de Orientación y Ayuda Psicológica (COAP), se ha desplazado a diferentes comunidades afectados por los ciclones para aliviar el sufrimiento.
Buscar tierra firme después de perder pie
El COAP brinda asistencia con el método del psicodrama a hombres, mujeres y niños que perdieron pie tras la catástrofe natural.
El método del psicodrama permite a grupos o individuos revivir episodios sufridos en los ciclones y así transformar e integrar estos sentimientos a la vida normal. A través del psicodrama, las victimas pueden reintegrar estas experiencias en un ambiente seguro. Emociones como rabia, tristeza, frustración y desesperación se transforman en energías positivas.
Las secuelas de huracanes representan un reto para cualquier gobierno. En países pobres como Cuba, la población experimenta los límites de la capacidad de ayuda oficial aún más directo. Al mismo tiempo, la sociedad civil afectada por el desastre natural, recibe fuertes impulsos de empoderamiento. Es decir, la ciudadanía siente la capacidad de hacer las cosas por su propia fuerza y acaba con la noción de que el individuo es un ser pasivo en la cooperación con autoridades y pasa a convertirse en un actor legítimo.
Empoderamiento y huracanes: Sí se puede
En el contexto cubano, el empoderamiento de los ciudadanos en tiempos de catástrofes naturales tiene connotaciones que rebasan lo psicológico y lo personal. Tras el retiro hace dos años de Fidel Castro como máximo líder de la Revolución, el país busca una transición hacia nuevos horizontes políticos y de la sociedad.
La profesora Ursula Hauser visualiza opciones positivas que pueden emanar de esta transición y apunta: “Abre nuevas vías de comunicación y de análisis de procesos históricos. Todavía no se sabe qué tipo de efectos tendrán sobre el proceso revolucionario. Espero que sean positivos. Espero también que se reconozca que el control y la represión disminuyen las fuerzas vitales dentro de una sociedad en vez de utilizarlos en forma productiva” vaticina la psiquiatra suiza en entrevista con swissinfo.
¿Psicodrama contra descontento?
Ursula Hauser opina que el psicodrama sirve como instrumento formidable para conocer las necesidades de una sociedad en transformación. “Es conveniente que campesinos, mujeres y niños hagan sugerencias desde su perspectiva. El partido oficial debería apoyar esta energía desde abajo. Evita así que el descontento y los conflictos desemboquen en problemas mayores.”
La psiquiatra suiza recomienda escuchar y tomar en serio lo que comunican las personas desde abajo en tiempos de crisis y en situaciones de desastres naturales y concluye: “No existen sociedades sin conflictos. Una sociedad sin conflictos se muere y no puede desarrollarse más”.
swissinfo, Erwin Dettling, de regreso de Cuba
El COAP funciona en colaboración con la Facultad de Psicología de la Universidad de La Habana. Entre los 15 programas de ayuda que ofrece se incluyen doctorados y maestrías de carácter nacional e internacional, como la desarrollada sobre Psicodrama y Procesos locales.
Cuenta con la colaboración de la ONG MediCuba-Suiza.
El psicodrama es una metodología que guía la acción grupal hacia la liberación de la fuerza personal y social. Se aplica para liberar a las victimas de angustias, miedos y terrores.
El psicodrama se compromete con la realidad cultural y política de un país o de una comunidad. El trabajo se fundamenta en una perspectiva dialéctica que busca la transformación social. Se basa en la acción colectiva y en el empoderamiento personal.
La Dra. Hauser está involucrada en la formación de profesionales de psicodramatistas en Costa Rica, Cuba y otros países.
Apoya a la organización Movimiento de Mujeres Mélida Anaya Montes en El Salvador, formando y capacitando promotoras de salud comunitaria.
En Cuba gestiona Maestrías en Psicodrama, colaborando con un proyecto de la Universidad de la Habana y con el COAP, para formar especialistas en procesos grupales, psicodrama y psicoanálisis.
En Palestina mantiene un proyecto similar desde el año 2002, con el ‘Gaza Community Mental Health Program’.
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