El Gobierno yemení urge una postura internacional firme contra el grupo separatista
Saná, 8 dic (EFE).- El presidente del Consejo de Liderazgo Presidencial del Yemen, Rashad al Alimi, instó lunes a la comunidad internacional a adoptar «una postura unificada y explícita» contra las fuerzas del secesionista Consejo de Transición Sureño (CTS), respaldadas por Emiratos Árabes Unidos (EAU), porque «ponen en peligro el proceso político».
Así lo indicó después de que el grupo reivindicara un amplio control en el sur, incluyendo Adén, sede del Gobierno reconocido internacionalmente durante casi una década y la capital provisional del Yemen tras la toma de los hutíes de Saná, informó en un comunicado el Consejo de Liderazgo (CLP).
Al Alimi aseguró durante su reunión en la capital saudí Riad con los embajadores de los países que impulsan el proceso político en el Yemen -Arabía Saudí, EAU, entre otros- que los avances militares unilaterales del CTS en las provincias orientales «socavan la seguridad unificada y la toma de decisiones militares y ponen en peligro todo el proceso político».
Asimismo, advirtió de la inestabilidad en las provincias de Hadramaut y Al Mahra, tomadas por el CTS, que podría provocar «graves repercusiones económicas y humanitarias», así como «retrasos en los salarios, escasez de combustible y pérdida de confianza de los donantes».
El CTS proclamó este lunes que sus fuerzas controlan ahora las ocho provincias del sur tras la operación militar lanzada la semana pasada, que enfrentó poca resistencia por parte de las fuerzas gubernamentales.
En un comunicado leído en la cadena de televisión Aden al Mustakillah TV, gestionada por el CTS, el grupo indicó que altos líderes del Gobierno, incluyendo a Al Alimi y al primer ministro, Ahmed Awad bin Mubarak, abandonaron Adén en los últimos días.
El CTS, que busca la secesión del sur, que existió como estado independiente hasta 1990, se ha enfrentado repetidamente con el Gobierno respaldado por Arabia Saudí, que se trasladó a Adén tras la toma de Saná por los hutíes en 2014.
Desde 2022, el grupo ha formado parte de un acuerdo de reparto de poder negociado por Arabia Saudí bajo el CLP, con el líder del CTS, Aidarous al-Zabidi, como vicepresidente. Sin embargo, esto no ha puesto fin a sus ambiciones secesionistas.
Cruciales para las rutas comerciales
Entre las zonas donde las fuerzas del CTS avanzaron la semana pasada se encuentran Hadramaut y Al Mahra, provincias fronterizas con Omán y Arabia Saudí, cruciales para las rutas comerciales.
Durante estas operaciones, se registraron enfrentamientos limitados en Hadramaut, mientras que las fuerzas gubernamentales en Al Mahra se retiraron o cambiaron de bando, lo que permitió al CTS tomar el control.
Al Alimi elogió el papel de Arabia Saudí por sus recientes «esfuerzos de desescalada» en Hadramaut, incluyendo un acuerdo que garantiza el funcionamiento de las instalaciones petroleras, pero afirmó que estos se ven «continuamente amenazados por acciones militares unilaterales» que alimentan la desconfianza.
Yemen «no puede soportar la apertura de nuevos frentes de desgaste» mientras la principal batalla siga siendo poner fin a la insurgencia hutí, añadió.
El presidente del Consejo de Liderazgo reiteró que ellos «no darán cobertura política» a ninguna medida tomada fuera de las instituciones estatales e instó a la comunidad internacional a rechazar públicamente los desafíos a la autoridad del Gobierno.
Asimismo, pidió presionar para garantizar la retirada de las fuerzas que entraron en Hadramaut y Al Mahra desde otras regiones, permitiendo que las autoridades estatales y locales garanticen la soberanía institucional.
La rivalidad entre el CTS y el Gobierno reconocido internacionalmente ha provocado repetidas crisis, enfrentamientos armados y un bloqueo del proceso político, ya que el Ejecutivo ha acusado a los separatistas de socavar la unidad del Estado y de querer imponer un proyecto secesionista. EFE
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