El laborista Corbyn afronta una moción de censura interna tras el Brexit
El líder de la oposición británica, Jeremy Corbyn, se enfrenta este martes a una moción de censura interna organizada por los diputados del Partido Laborista en el Parlamento, descontentos con su campaña durante el referéndum del Brexit.
Corbyn ya ha avisado de que no dimitirá, incluso si se produce un voto negativo. La moción de censura no tiene efectos inmediatos, puesto que el resultado debe ser convalidado por los 150.000 miembros del partido. Pero un voto negativo sería una señal clara de desconfianza.
La mitad del gabinete de Corbyn -que equivale a la dirección del partido- ha dimitido desde el domingo, para expresar su desacuerdo con el liderazgo del veterano político, de 67 años, que asumió su cargo en septiembre pasado.
Corbyn, de tendencia socialista, que en 1975 votó en contra de la adhesión del Reino Unido a la UE, ha sido muy criticado por la cúpula del partido porque su campaña fue poco entusiasta a favor de la permanencia. El 37% de los votantes laboristas votó por el Brexit, en contra de la línea oficial del partido.