ELN reanudará su actividad guerrillera en medio de pandemia en Colombia
El ELN, la última guerrilla reconocida en Colombia, anunció este lunes que reanudará sus operaciones militares a partir del 1 de mayo, tras el alto al fuego de un mes que concedió ante la emergencia sanitaria por el nuevo coronavirus.
En un comunicado difundido en su página web, los rebeldes criticaron al gobierno de Iván Duque por no haber “respondido de manera recíproca” al cese al fuego y le achacaron su falta de “voluntad” para “retomar los diálogos de paz en La Habana”.
“Las estructuras del ELN reanudarán sus operaciones militares a partir de la fecha y hora señalada”, advirtió la guerrilla.
El Ejército de Liberación Nacional (ELN) pidió además el regreso de sus negociadores de paz que se encuentran en Cuba, “con todas las garantías y condiciones de seguridad pactadas con el Estado colombiano”.
Ante el avance de la pandemia en el país, que ha dejado casi 5.400 contagios, incluidos 244 muertos, desde el 6 de marzo, el ELN anunció la suspensión de sus actos de guerra entre el 1 y el 30 de abril y planteó al gobierno de Iván Duque negociar durante ese tiempo un cese bilateral de acciones.
Sin embargo, durante este tiempo el gobierno no hizo público ningún contacto con el mando guerrillero.
– Negociaciones en vilo –
En armas desde 1964, el ELN dijo en su momento que interrumpía temporalmente su lucha con el Estado colombiano siguiendo el llamado a una tregua global que formuló la ONU ante el impacto de la pandemia.
“Queda claro que estamos ante un gobierno guerrerista, sordo a los llamados del papa Francisco y del secretario general de la ONU, y ciego ante la tragedia humanitaria que está padeciendo el pueblo colombiano”, deploró la organización.
En un comunicado, el representante especial del secretario general de la ONU en Colombia, Carlos Ruiz Massieu, destacó el “acatamiento significativo” de la tregua y alentó al ELN a “prorrogar su cese al fuego”.
“En este periodo no se han registrado operaciones militares ofensivas de la Fuerza Pública contra el ELN. Esto se ha traducido en una reducción en los niveles de violencia y por lo tanto un alivio en las condiciones de muchas poblaciones afectadas por el conflicto armado”, añadió en el boletín.
Duque rompió hace más de un año las conversaciones de paz que venía sosteniendo esa guerrilla con su antecesor, el Premio Nobel de la Paz Juan Manuel Santos, a raíz de una ataque con carro bomba contra una academia policial que dejó 22 cadetes muertos, además del agresor.
Colombia exigió luego a Cuba la captura y entrega del equipo negociador del ELN, lo que derivó en un deterioro de las relaciones diplomáticas entre los dos países ante la negativa de La Habana, que apeló a los protocolos firmados por las partes para garantizar el retorno de los rebeldes a su país si fracasaba el proceso de paz.
El mandatario colombiano condicionó su regreso a la mesa de negociaciones a la liberación de los secuestrados y la suspensión de todas las “actividades criminales” por parte del ELN, a lo que siempre se ha rehusado el mando rebelde por considerarlas imposiciones unilaterales.
