Emiliano Dudar vuelve a entrenarse
El defensa argentino del Young Boys de Berna, Emiliano Dudar, abandonó el hospital tras casi un mes de internamiento debido al choque que sufrió en un partido ante el FC Basilea, que le ocasionó una conmoción cerebral y la fractura de la nariz.
Incluso declaró con optimismo al diario suizo ‘SonntagsBlick’: “En noviembre estoy de vuelta”.
La semana pasada podía salir finalmente del Inselspital de Berna, casi cuatro semanas después del terrorífico impacto que se produjo con François Affolter, el pasado 12 de septiembre. Dudar ha comenzado a entrenar de nuevo, aunque a un ritmo menor.
Más tarde se irá reincorporando al grupo, casi seguro en diciembre. “Corro, hago ejercicio y me siento muy bien. No tengo ningún dolor”, explica el defensa al rotativo de Zúrich.
Dudar disfruta de su familia, de su esposa Lorena y su hijo Santino (de 3 años). “Los primeros días después del accidente no querían que mi hijo me viera”.
Del suceso no recuerda casi nada. “Mi esposa estaba sentada a mi lado cuando me desperté del coma inducido. Yo le dije: ¿Qué es esto? ¿qué estoy haciendo aquí? Dentro de dos días tengo un partido contra el Basilea. ¡Tengo que ir a entrenar! Entonces ella me explicó todo muy suavemente. Solo cuando vi la fecha en el reloj me di cuenta de que algo había sucedido”.
Preguntado por si tiene miedo de volver a disputar jugadas aéreas, Dudar indica que “los médicos dicen que el miedo desaparecerá después del primer duelo. De esto también estoy convencido. Tengo muchas ganas de volver a jugar. Estamos en la la próxima ronda de la Copa de Suiza. El campeonato de liga todavía no está decidido. Estamos también en la Europa Liga de la UEFA. Muchos partidos importantes en los que quiero estar”, asegura el argentino.
Mensaje de agradecimiento
A través de un vídeo publicado hace unos días en la página web del Young Boys, Dudar quiso agradecer el apoyo y las muestras de cariño recibidas de los hinchas del club de Berna.
“Sinceramente, no pensé que me iban a dar el apoyo que me dieron, todo el cariño, las cartas y los mensajes que recibí en los momentos difíciles”, dijo el jugador, que añadió: “Les tengo mucho cariño. Para toda la vida esos recuerdos estarán guardados en el fondo de mi corazón. Los quiero mucho y les mando un gran abrazo”.
“Un privilegio profesional”
“Jugar en Suiza y poder llegar a un equipo como el Young Boys, es un avance muy significativo para mí. No son tantos los jugadores latinoamericanos que podemos llegar al fútbol europeo”, reconocía el propio Dudar a swissinfo.ch, justo hace un año, a su llegada al club capitalino.
En la larga carrera deportiva de Dudar figuran también una serie de nombres de clubes importantes como los argentinos Independiente, Banfield y Tigre o el Vasco da Gama brasileño.
“Es un placer jugar en Suiza, un país que está en constante crecimiento futbolístico. Se ve, por ejemplo, en la calidad de los estadios de la mayoría de los equipos resultado de inversiones millonarias. Y en la capacidad de contratar jugadores extranjeros. Eso establece una gran diferencia, por ejemplo, con Sudamérica”, señalaba a swissinfo.ch.
Del deber profesional al placer del trabajo, apenas un pequeño paso en la reflexión de Dudar, que sin olvidar el plano deportivo enumeraba aspectos que hacen la diferencia. “La calidad de vida, la tranquilidad y seguridad, especialmente cuando se viene acompañado por la familia. Y la calidez humana de la gente en la calle, del público, de los dirigentes, de los otros compañeros de equipo. Es admirable”.
Aspectos complementarios pero esenciales que hacen que “la experiencia futbolística en Suiza tenga un gran sentido. Mucho más al ver el potencial del fútbol nacional en pleno crecimiento”, concluía.
El pasado 12 de septiembre, el defensor impactó de manera violenta con Affolter y quedó inconsciente en el terreno de juego del ‘Stade de Suisse’ durante ocho minutos.
Acto seguido fue trasladado un centro hospitalario en estado de coma inducido para evitar una posible inflamación del cerebro y controlar mejor las funciones vitales.
El accidente se produjo pocos minutos antes del descanso, ambos se golpearon la cabeza.
Precisamente el argentino volvía a los campos tras cuatro semanas lesionado.
Tras el hecho, el drama sobrevoló el estadio y las imágenes de televisión fueron impactantes.
El argentino sufrió contracciones y se llegó a temer los peor.
Los doctores que le atendieron esperaban una recuperación completa del bravo jugador que vive su segunda campaña en el Young Boys tras su paso por la Bellinzona, también de la Primera División helvética.
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