HRW: La oposición en Camerún cifra en 55 los muertos por las protestas poselectorales
Nairobi, 12 nov (EFE).- Al menos 55 personas murieron en las protestas desatadas en Camerún tras las polémicas elecciones del pasado 12 de octubre, fuertemente reprimidas por las fuerzas de seguridad, informó este miércoles la organización Human Rights Watch (HRW), que aseguró haber obtenido esos datos de la oposición.
«Fuentes de la oposición que hablaron con Human Rights Watch cifran el número de muertos en 55», afirmó la ONG en un comunicado.
«La violenta represión contra los manifestantes y los ciudadanos de a pie en todo Camerún pone de manifiesto un patrón de represión cada vez más profundo que ensombrece las elecciones», señaló en un comunicado Ilaria Allegrozzi, investigadora sénior para África de HRW.
Allegrozzi subrayó que las autoridades «deben controlar, investigar y enjuiciar inmediatamente a las fuerzas de seguridad responsables y todos los líderes políticos deben pedir a sus seguidores que rechacen la violencia».
La ONG habló con veinte personas, incluyendo familias de personas que murieron o fueron heridas durante las protestas, así como abogados y miembros de la oposición, que proporcionaron la cifra de muertos de acuerdo a su conteo.
Según un grupo de 149 letrados organizado para defender ‘pro bono’ a los detenidos durante las marchas, hasta 2.000 personas fueron arrestadas por las fuerzas de seguridad, incluyendo menores.
Las autoridades han proporcionado información sobre 105 detenidos el 26 de octubre en Duala (oeste), capital económica del país, y HRW pudo revisar listas elaboradas por abogados cercanos a la oposición con los nombres de al menos 312 personas arrestadas desde esa fecha.
Según los letrados, los cargos contra ellos incluyen «hostilidad contra la patria, revolución, rebelión e insurrección».
Las protestas, que estallaron el 26 de octubre -un día antes del anuncio de los resultados oficiales- y se alargaron durante varios días en diferentes ciudades, tuvieron como respuesta la «fuerza letal» de la Policía y la Gendarmería, que emplearon gases lacrimógenos y munición real, denunció HRW.
En algunos puntos, los movilizaciones fueron violentas y los manifestantes asaltaron a los agentes, arrojando piedras y otros objetos, construyendo barricadas y saqueando edificios públicos y privados.
El presidente camerunés, Paul Biya, el jefe de Estado más viejo del mundo a sus 92 años, fue investido el pasado día 6 para un octavo mandato de siete años, tras ser declarado vencedor de los comicios por el Consejo Constitucional, cuyas decisiones no admiten apelación.
Biya obtuvo un 53,66 % de los sufragios, mientras el opositor Issa Tchiroma Bakary logró un 35,19 %, después de declararse vencedor dos días después de la votación.
Tras una polémica reforma constitucional en 2008 que eliminó el límite de mandatos presidenciales y permitió a Biya seguir concurriendo a comicios, el mandatario es actualmente el segundo presidente con más tiempo en el poder, por detrás del ecuatoguineano Teodoro Obiang.
Además del presidente, otros once candidatos compitieron en los comicios, ensombrecidos por la ausencia del principal rival de Biya, el opositor Maurice Kamto, cuya candidatura fue rechazada por la comisión electoral (ELECAM). EFE
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