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Inmigración: Electores suizos por la línea dura

El resultado de la votación convierte a Suiza en uno de los países más restrictivos en materia de asilo en Europa. Keystone

Un 68% de los votos en favor de las leyes que endurecen la política suiza en materia de inmigración. "NO" del 58% del electorado a la iniciativa para que el Banco Nacional apoye el sistema de pensiones.

Los electores de las diversas regiones del país se pronunciaron de manera uniforme sobre los tres temas sometidos a escrutinio.

Según los resultados definitivos, todos los cantones votaron en favor de las leyes sobre extranjeros y asilo.

Sólo los cantones de Ginebra, Tesino y Basilea-Ciudad se pronunciaron en favor de la iniciativa COSA que, sin embargo, fue rechazada. La medida requería la doble mayoría: la del pueblo y la de los cantones.

Las leyes sobre los extranjeros y los solicitantes de asilo obtuvieron el 68% de los votos, mientras que el rechazo a la iniciativa para el apoyo del sistema de pensión con fondos del Banco Nacional (COSA) fue de 58% del escrutinio.

COSA es la 146 iniciativa en naufragar en votaciones federales desde 1891. De las 161 iniciativas sometidas al pueblo desde la introducción de ese derecho, quince solamente (9,3%) han sido aprobadas.

Cabe destacar, no obstante, que tres iniciativas populares pasaron victoriosamente la prueba de la votación en los últimos años.

Una de ellas pedía la adhesión de Suiza a la ONU (marzo de 2002); otra, la reclusión a perpetuidad de los delincuentes muy peligrosos (febrero de 2004) y una tercera, que solicitaba la moratoria de los Organismos Genéticamente Modificados (OGM) (noviembre de 2005).

Durante mismo período, es decir desde el 2002, no menos de 13 iniciativas populares han sido rechazadas en votación.

La satisfacción del gobierno

Sobre el fracaso de la iniciativa COSA, el ministro de las finanzas Hans-Rudolf Merz, comentó que “una fuerte mayoría de los votantes reconoció que COSA no habría aportado ninguna solución y que habría creado, al contrario, nuevos problemas”.

Por su parte, el ministro de Justicia y Policía, Christoph Blocher, rechazó hacer del plebiscito popular en favor de las leyes sobre el asilo y los extranjeros una victoria personal.

“No es mi victoria, sino la victoria de una decisión muy importante”, que permitirá a Suiza conducir una política migratoria “responsable”, destacó el consejero federal, quien contribuyó ampliamente al endurecimiento de las leyes.

Desengaño socialista

El Partido Socialista (PS) sufrió una triple derrota este domingo frente a los tres otros partidos gubernamentales.

En efecto, fue el único en combatir el endurecimiento de las leyes sobre el asilo y sobre los extranjeros. Y el único también en apoyar la iniciativa COSA.

El presidente del PS, Hans-Jürg Fehr imputa el fracaso de la iniciativa de la izquierda a dos factores.

Para él, la oposición masiva del Consejo Federal y los cantones, así como el recurso conciente a afirmaciones falsas permitieron el resultado del voto. Ello, sin contar los millones de francos que fueron invertidos en la campaña.

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Referéndum

Este contenido fue publicado en El referéndum (facultativo) es un instrumento mediante el que los ciudadanos pueden solicitar que una ley aprobada por el Parlamento sea sometida a votación popular. Los promotores del referéndum tienen que recoger 50.000 firmas a favor en el plazo de 100 días para que se celebre el escrutinio. Las enmiendas constitucionales aprobadas por el Parlamento…

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Los partidos burgueses, satisfechos

El Partido Demócrata Cristiano (PDC) acogió con satisfacción el rechazo del pueblo a la iniciativa COSA, además de que manifestó su certeza en el sentido de que la aceptación de las leyes sobre el asilo y los extranjeros permitirá preservar la tradición humanitaria helvética.

Para su presidente, Chritophe Darbellay, hay que reforzar las actividades de integración y evitarl los “guetos a la francesa”.

Los Radicales (PRD) también se regocijaron con el resultado de la votación del domingo. Según su presidente, Fulvio Pelli, Suiza dispone en lo sucesivo de una política de migración centrada sobre la integración y la calificación.

Finalmente, el Presidente de la Unión Democrática del Centro (UDC/derecha dura) manifestó su satisfacción. Aunque, para Ueli Maurer, según dijo, estos resultados no constituyeron una sorpresa.

Desilusión de Amnistía Internacional y ACNUR

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) lamentó la adopción en Suiza de una ley más restrictiva en materia de asilo. El organismo manifestó su preocupación por la obligatoriedad de que los solicitantes de asilo presenten pasaportes válidos.

“Estamos decepcionados ya que las peticiones de asilo están en su nivel más bajo en Suiza desde hace 20 años”, señaló el portavoz del ACNUR, Wiliam Spindler.

“Suiza adoptó una de las legislaciones más restrictivas en Europa y otros países podrían seguir el ejemplo”, acotó.

Amnistía Internacional anunció, por su parte, que seguiría de cerca la correcta aplicación de las leyes.

La organización de los derechos humanos dijo que velará particularmente por que sean mantenidas las promesas de los partidarios del ‘SI’, con respecto a los solicitantes de asilo que ya no tengan pasaportes válidos.

Amnistía Internacional consideró éste, como un “domingo negro para el derecho del asilo en Suiza”.

swissinfo y agencias

Esta es la novena ocasión, desde 1984, en que la ley de asilo de Suiza es enmendada. Cinco de las propuestas tendientes a endurecer las regulaciones fueron aprobadas en votaciones nacionales.

Conforme a un tratado bilateral con Bruselas, los ciudadanos de la Unión Europea no están sujetos a restricciones en materia de inmigración. Pero hay una comunidad importante de personas originarias de los países balcánicos y de Turquía que vive en Suiza.

El esquema de pensión para las jubilaciones es el pilar central del sistema de seguridad social del país y está financiado por contribuciones de patrones, empleados y el Estado. Busca proporcionar la cobertura mínima para toda las personas de más de 65 años (hombres) y 64 (mujeres).

El voto sobre los beneficios para la vejez requiere una mayoría de votantes y cantones para ser aprobado.

Las convocatorias a referéndum contra el endurecimiento en materia de asilo y contra las reglas de inmigración requieren sólo una mayoría simple de votantes.

Aproximadamente 4.84 millones de personas, de más de 18 años, tienen derecho a voto en Suiza; la asistencia promedio a las a las urnas es de 40% en el país.

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