La ‘dama de hierro’ ginebrina
El cantón de Ginebra tiene el honor de contar con un segundo ministro en el Gobierno. Además es socialista.
Pero Micheline Calmy Rey, elegida nueva ministra este miércoles por el Parlamento suizo en Berna, no es ginebrina.
En un cantón tan internacional y multicultural como lo es el de Ginebra, sede de numerosos organismos internacionales, el hecho no es una sorpresa. Tampoco que la ministra provenga de las filas del Partido Socialista y que su condición de favorita se confirmara durante el escrutinio de la Asamblea Federal.
Lo más significativo de su elección reside en la personalidad de la nueva ministra, conocida en el mundo político ginebrino como ‘la dama de hierro’ y por el sobrenombre de ‘Cruella’ (cruel), en razón de su aparente temperamento frío y de mujer de mando. Este es el perfil político de la sucesora de Ruth Dreifuss, la actual ministra del Interior dimisionaria.
Una valesana en Ginebra
Micheline Calmy-Rey es oriunda de la comuna de Chermingon, en el cantón del Valais, comuna donde nació hace 57 años. Combativa, comenzó a militar en las filas del Partido Socialista cuando aún era estudiante secundaria.
Se trasladó a Ginebra donde realizó sus estudios universitarios, obteniendo un postgrado en el Instituto de Altos Estudios Internacionales (IHEI). En 1986 fue elegida presidente del Partido Socialista ginebrino, función que ejerció hasta 1990 y que su plataforma política.
Su cargo de directora de una pequeña empresa familiar no le impidió participar con éxito en las elecciones municipales, siendo elegida a ocupar un escaño en el Gran Consejo (gobierno cantonal, en representación del Partido Socialista.
En 1997 deja ese puesto, tras ser elegida brillantemente en el cargo de Consejera de Estado, la máxima instancia gubernamental de su cantón de adopción. Es designada por sus pares al frente de la cartera de Finanzas, donde contrariamente a lo vaticinado por sus detractores de los partidos de derecha, logrará equilibrar las alicaídas finanzas del cantón.
Tras su reelección en las elecciones cantonales de 1999, se convierte en la figura clave de su partido y en una candidata potencial a suceder a Ruth Dreifuss (socialista) en el Gobierno federal.
Madre y abuela
Feminista, madre de familia y desde hace algunos meses abuela, la ‘dama de hierro consolidó su carrera política al ser elegida la cuarta mujer en la historia de Suiza que accede a un puesto en el seno de Gobierno.
Dado el sistema de rotación (entre los 7 miembros del Gobierno) que caracteriza el cargo de presidente de la Confederación Helvética, no será nada de extraño que Micheline Calmy-Rey vea coronada su carrera política en los próximos años accediendo a la presidencia del país.
Por ahora deberá esperar la próxima semana, ocasión en que sus colegas en el gabinete federal decidan qué cartera se le asignará, que bien podría ser la de Finanzas, teniendo en cuenta la experiencia adquirida en Ginebra.
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