Luz verde al alminar de Langenthal
Las autoridades de Berna desestimaron el martes la demanda de los opositores a la construcción de un alminar en la localidad de Langenthal. El permiso de construcción había sido concedido antes de la aprobación del pueblo suizo de la iniciativa anti alminares.
No obstante, todavía es posible presentar un recurso ante la decisión.
La Dirección de Obras Públicas, Transportes y Energía (TTE) del cantón de Berna, que se pronunció sobre un recurso presentado, confirmó la concesión de un permiso para la construcción de un alminar y una cúpula, mientras que negó al mismo tiempo la expansión y renovación del centro de culto.
La prohibición de alminares fue aprobada en votación popular el 29 de noviembre de 2009, mientras que está en marcha el proceso de apelación. En estos casos, en principio se aplica la antigua ley, según explicó la Cancillería de Estado del Cantón de Berna.
Autorizado el 30 de junio 2009, cinco meses antes de la votación, el permiso de construcción debía ser evaluado sobre la base de la situación legal vigente en esa fecha. El alminar y la construcción de la cúpula respetaban las normas de construcción. Así, el cantón de Berna ha confirmado el permiso para realizar esta parte de la obra.
No a la ampliación
En cambio, las citadas autoridades aprobaron el recurso interpuesto por varios vecinos del centro contra la expansión y la renovación del edificio. El índice de uso del suelo está superado, el número de plazas de aparcamiento para coches y bicicletas es insuficientes, el acceso a los espacios públicos en silla de ruedas no está asegurado y la seguridad del tráfico no está garantizada, argumentaron las autoridades de Berna.
El presidente de la comunidad musulmana en Langenthal expresó su satisfacción al respecto, diciendo que se trata de una victoria del Estado de Derecho. Sin embargo, expresó su decepción por la negativa de la ampliación del centro y tiene la intención de apelar la decisión.
Decisión controvertida
El 29 de noviembre de 2009, el pueblo suizo se pronunció con un 58% de votos y un 55% de participación ciudadana a favor de inscribir la prohibición de edificar alminares en las mezquitas de Suiza.
La iniciativa popular fue fruto de una propuesta del partido de la derecha nacionalista Unión Democrática del Centro (UDC), que representa al 29% de ciudadanos suizos, y es mayoritario en el Parlamento, y la minoritaria Unión Democrática Federal (UDF).
La decisión de los votantes suizos de prohibir la construcción de alminares despertó las críticas de los colectivos musulmanes, gobiernos, Naciones Unidas y el Consejo de Europa -mientras que fue alabada por la derecha política europea. Algunos expertos aseguraron que la imagen exterior de Suiza se había visto afectada por el resultado de la votación.
En marzo, el Informe Anual sobre Derechos Humanos del Departamento de Estado norteamericano citó la medida como un ejemplo de discriminación musulmana en Europa.
Después, el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, con sede en Ginebra, respaldó una resolución, propuesta por la Organización de la Conferencia Islámica (OCI), calificando la prohibición como una “manifestación de islamofobia”.
La comunidad musulmana en Suiza representa el 4,5% de la población e incluye a 100 nacionalidades.
Muchos de los emigrantes musulmanes proceden de la antigua Yugoslavia y Turquía.
En Suiza hay cuatro alminares: en Ginebra, Winterthur, Zúrich y Wangen en Olten.
Según un estudio de la Comisión Federal de Extranjeros, en Suiza hay alrededor de 200 mezquitas, centros culturales y moradas de plegaria.
La mayoría de estos lugares funciona en viviendas o edificios comunes.
con agencias
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