Frenar el cambio climático urge como nunca

Al Gore fue uno de los oradores del Foro Económico Mundial de Davos, donde afirmó que deben crearse empleos que ayuden a resolver el problema del cambio climático. Keystone

Christiana Figueres, coordinadora de la Cumbre del Cambio Climático COP 21, celebrada en París, se dijo "enormemente preocupada" por el tratamiento que dará el nuevo gobierno estadounidense de Donald Trump al calentamiento global, e instó al mundo a actuar con agilidad en la instrumentación del acuerdo que se alcanzó en 2015.

Durante un discurso pronunciado en el llamado ‘Campamento del Ártico’, un espacio recreado por científicos en Davos para concienciar a políticos, empresarios y celebridades sobre los riesgos que supone en calentamiento global en esta zona, Christiana Figueres afirmó que es tiempo de que los debates climáticos se alejen del ámbito político para dirigirse a las empresas, los inversionistas y la gente de a pie.

“Debemos sacar el debate climático del mero discurso para compartirlo con la gente que de verdad puede generar un cambio, como la iniciativa privada, los inversores, los gobiernos locales y la población en general”, añadió.

Para memoria, en el Acuerdo de París del 2015 un total de 195 países se comprometieron a restringir el calentamiento global a menos de 2 grados centígrados por encima de los niveles que reportaba antes de la industrialización. Y los involucrados intentarán, de hecho, que no supere los 1,5 grados.

Figueres, quien también fungiera como secretaria ejecutiva de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático entre 2010 y 2016 –período durante el cual se firmó el Acuerdo de París–, advirtió que actualmente el cumplimiento de las metas climáticas está en riesgo también porque muchos gobiernos están adoptando políticas proteccionistas, que deben revisar.

Sobre el próximo gobierno estadounidense, reconoció su inquietud ya que el tema del calentamiento global no es una prioridad para el presidente electo Donald Trump.

Otro de los oradores del campamento del Ártico -donde todos los visitantes reciben amplia información sobre la forma en la que las regiones polares se ven alteradas por el incremento en las temperaturas– fue el exvicepresidente estadounidense, Al Gore, quien advirtió que el calentamiento global podría provocar millones de “refugiados climáticos”, añadiendo más inestabilidad política y social al mundo.

En contrapartida, dijo, trabajar con ahínco en crear soluciones para este problema se traduciría en la creación de innumerables empleos que dinamizarían la economía global, que “es justo lo que el médico le ha recetado al mundo”, metaforizó.