Pintora suiza recibe el Premio Fred Thieler de Berlín
La artista Pia Fries fue distinguida este martes con el Premio Fred Thieler de pintura, en una ceremonia realizada en la sede de la Berlinische Galerie con la presencia de distinguidas personalidades europeas de la cultura y las artes plásticas.
La Berlinische Galerie es una entidad oficial dedicada a conservar y a exponer en muestras especiales obras de artistas alemanes y extranjeros que han trabajado en Berlín.
Los óleos sobre madera de Pia Fries -formada en Lucerna y en Düsseldorf (Alemania)- destacan por la fuerza y el brillo de sus colores, así como por las interesantes formas y caprichosas estructuras que la artista desarrolla con pinceles y espátulas.
Los cuadros de gran formato (catálogo de editorial Richter/Düsseldorf) cobran enorme vida ante el espectador y su obra “no muestra en absoluto rasgos de rutina, manierismo formal o de cansancio en su contenido”, destacó el profesor Stephan Berg, director del Museo de Arte de Bonn, al pronunciar el discurso laudatorio en la ceremonia de entrega de la distinción.
Inspiración
Fries dedicó una serie de sus cuadros (‘Flores negras’, 2006) a las investigaciones de la naturalista, dibujante y grabadora alemana Maria Sybilla Merian (1647-1717) combinando la serigrafía con el óleo sobre madera. Merian dedicó sus trabajos a la ilustración con carácter científico de flores, mariposas e insectos y su metamorfosis.
En otras obras, la pintora suiza combina imágenes fotográficas de sus masas de color reflejadas sobre superficies de cristal, que duplican su volumen, junto a las formas y estructuras corpóreas creadas con óleos mezclados con resinas.
“La intención es que el color hable por sí mismo. El color tiene cuerpo y piel, como usted o como yo, y ese cuerpo y esa piel relatan su vida y lo que han vivido”, explicó Fries en una entrevista exclusiva con swissinfo.
El Premio Fred Thieler de pintura, dotado con 10.000 euros, se otorga cada a dos años a artistas plásticos alemanes o extranjeros que viven y trabajan en Alemania y que se han destacado por la proyección de su obra a escala internacional.
La metamorfosis
“La metamorfosis es un tema constante que recorre toda mi obra”, dijo Fries. El tema es en realidad la transformación o lo transitorio, las transiciones, los estados de transición, tal como nosotros mismos siempre nos transformamos”.
“Cuando nos observamos también nos transformamos. Es un principio vital constante: por un lado, una nueva creación, y por otro, una pérdida, un ir y venir, devenir y expirar”, señaló Fries.
La pintora suiza presentará sus obras en junio próximo en Basilea, en septiembre en París y a finales de este año y comienzos de 2010 en Madrid.
ARCO
Pia Fries es una artista “con una técnica impecable que ha encontrado un lenguaje que es muy característico y único y que encaja muy bien con el gusto español”, según Isabel Yanguas, directora de la galería ‘Distrito Cu4atro’ de Madrid, que ha vendido obras de la artista suiza a coleccionistas de Europa, Estados Unidos y otras regiones del mundo.
Las obras de Fries se presentarán en febrero de 2010 por sexto año consecutivo en la Feria Arco, de Madrid. “En España he tenido hermosas experiencias”.
“Me fascina esa forma de disfrutar la vida, muy diferente a lo que vivimos aquí en el norte y en Alemania”, confiesa la artista suiza.
“Lamentablemente no tengo atelier en España”, pero “me gustaría experimentar algún día la influencia de la luz del Mediterráneo en mis cuadros”.
swissinfo, Juan Carlos Tellechea, Berlín
Pia Fries, nacida en Beromünster (cantón Lucerna), estudió escultura en Lucerna, antes de ser alumna del artista alemán Gerhard Richter en Düsseldorf en la década de 1980.
Desde 2007 Fries es profesora invitada en la Universidad de las Artes de Berlín.
En los cuadros de Pia Fries el color sirve como material de expresión plástica. El óleo mezclado con resinas para darle forma y cuerpo es amasado sobre un fondo blanco en gruesas protuberancias, es prensado, estriado y raspado una y otra vez.
La artista suiza muestra, más allá de los convencionalismos, cómo el color puede convertirse en un medio para la abstracción.
El color, convertido en figura protagónica, muestra su diversidad interior y su dinamismo exterior, y tiene un desarrollo corporal que abraza al espectador con su vitalidad.
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