Rusia, condenada a pagar 50.000 millones de dólares a los accionistas de la petrolera Yukos
La justicia internacional condenó a Rusia a pagar 50.000 millones de dólares a los accionistas del antiguo gigante petrolero Yukos por haberles expropiado, anunciaron este lunes sus representantes.
El Tribunal Permanente de Arbitraje de La Haya juzgó el 18 de julio que Rusia forzó a Yukos a la bancarrota y vendió sus activos a empresas estatales por «motivos políticos», declaró en una rueda de prensa en Londres Tim Osborne, director de GML, antiguo accionista mayoritario.
El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, señaló que su país «utilizará todas las opciones jurídicas» para defender su posición en este caso, poco antes de que se diera a conocer el veredicto.
«Los accionistas mayoritarios no recibieron compensación por la pérdida de sus inversiones cuando Rusia expropió ilegalmente Yukos», subrayó Osborne.
Dos de las filiales de GML y un fondo de pensiones de los antiguos empleados de la compañía están detrás de esta demanda, interpuesta en 2005 ante el tribunal de La Haya.
Yukos, antiguo número uno del petróleo en Rusia, fue desmantelado por el poder en Moscú hace diez años, bajo acusaciones de fraude fiscal, y vendido por partes, sobre todo al grupo petrolero estatal Rosneft.
– Jodorkovski, al margen de los procesos contra Rusia –
Su principal fundador, Mijail Jodorkovski, fue encarcelado durante una década e indultado inesperadamente el 20 de diciembre pasado, como medida de gracias del presidente ruso, Vladimir Putin.
Antiguo oligarca crítico con el Kremlin y exhombre más rico de Rusia, Jodorkovski recordó poco después de su liberación que había dejado de formar parte de los procesos judiciales contra el Estado ruso.
El Tribunal Permanente de Arbitraje «confirmó que la ofensiva de la Federación de Rusia contra Yukos, sus fundadores, entre ellos Mijail Jodorkovski, y sus empleados estaba motivada por razones políticas y que el principal objetivo (…) era precipitar la bancarrota de Yukos en beneficio del Estado vía Rosneft», dijo Osborne.
Rosneft aseguró este lunes que «todas las operaciones» realizadas para la adquisición fueron «completamente legales y de acuerdo a la legislación en vigor».
Los demandantes reclamaban una compensación de 100.000 millones de dólares, cuatro veces el total de sus inversiones en Yukos, teniendo en cuenta lo que valdrían actualmente sus acciones, más los intereses.
Agregaron que no había posibilidad de apelación y confiaron en que Moscú se conformaría con la decisión de la justicia internacional.
Su abogado, Emmanuel Gaillard, aseguró que se trata de una decisión «histórica» del Tribunal de Arbitraje de La Haya y que el monto de la indemnización es 20 veces superior a la multa más elevada impuesta hasta ahora por el tribunal.
Los demandantes se apoyaron en el Tratado de la Carta de la Energía (TCE), que protege a los inversores en sus proyectos energéticos.
El principal beneficiario de esta decisión es GML, un holding basado en Gibraltar que poseía Yukos, así como Leonid Nevzline, exsocio de Jodorkovsky, quien le transfirió sus activos en 2005.