Un viaje a través de la migración en Suiza
Una exposición sobre la migración gallega en Suiza destaca aspectos humanos y culturales del fenómeno y pone de relieve el importante aporte económico del migrante.
Inaugurada por el presidente de la Xunta, Manuel Fraga, la muestra constituyó una de las etapas de la reciente visita del presidente suizo, Pascal Couchepin, a tierras gallegas.
Organizada por MiraSuiza, programa prioritario para España de Presencia Suiza, en colaboración con la Consejería de Cultura de la Xunta (gobierno gallego), la exposición plantea un viaje por diversos aspectos de la migración teniendo como telón de fondo la gran ruta jacobea de la peregrinación europea.
Peremigración, señala la directora de MiraSuiza, Francesca Antonelli, “es un recorrido sensorial por las huellas de la migración gallega en Suiza, con el que se pretende destacar el rastro que este fenómeno deja tanto en el individuo como en la sociedad que le acoge”.
La exposición está diseñada en forma de cruz, con un patio central que recoge el rastro que dejan los visitantes a su paso, como si fueran caminos efímeros que evocan las huellas del peregrino o testimonios pasajeros de los “migrantes en su nuevo destino”.
Los cuatro espacios de la exposición están dedicados a evocar los aspectos lingüísticos, sociales, culturales y económicos del fenómeno de la migración.
Rastro lingüístico
Como si efectivamente de un peregrino se tratara, el visitante inicia su recorrido por la exposición atravesando un pórtico en el que escribirá su nombre sobre una pantalla táctil.
Inmediatamente, un programa sonoro interactivo transforma ese nombre en una secuencia de sonidos de gaita que se superponen sobre un fondo armónico permanente representado por una tuba alpina.
“Con esta mezcla de sonidos”, señala Francesca Antonelli, “queremos representar el fenómeno de la integración lingüística que conlleva la migración”. “Ese plurilingüismo supone un importante valor añadido para el migrante y la sociedad en la que se integra”.
Rastro social
El aspecto humano de la migración es evocado mediante el popular juego del futbolín. Instalado sobre un suelo acolchado y mullido, el visitante experimentará una sensación de inseguridad y de cierto aislamiento.
Esa impresión se ve reforzada con una experiencia de juego imprevisible, al comprobar que el equipo contrario está formado por fotografías de personas desconocidas que sustituyen a los muñecos tradicionales.
“Este juego”, señala la promotora de la muestra, “pretende simbolizar las impresiones del viaje, a través de nuevos rostros y del descubrimiento de un nuevo entorno, pero evocando también la memoria del paisaje añorado y de la gente dejada atrás”.
Rastro cultural
La integración del migrante en la sociedad de acogida constituye el tema del tercer espacio de esta exposición. Un nuevo futbolín ayuda al visitante a imaginar la capacidad de adaptación a un nuevo entorno que tiene que poner en juego un migrante.
“La idea es que ambas partes tienen que dar un paso la una hacia la otra”, señala la directora en España de MiraSuiza. “Por ello el futbolín que representa este proceso anula el concepto de competitividad, convirtiéndose en un juego que requiere la colaboración y entendimiento de los participantes”, apostilla Francesca Antonelli.
Rastro económico
El deseo de progresar económicamente y la búsqueda de bienestar social de cualquier migrante son evocados mediante un nuevo futbolín en el que se sustituye a los jugadores tradicionales por elementos simbólicos.
“Unas llaves, por ejemplo, representan el deseo de construirse un hogar en la tierra natal, mientras que unas herramientas simbolizan el trabajo y el esfuerzo realizado durante su estancia en Suiza”, nos explica la promotora de la exposición.
Tras un mes de permanencia en Santiago de Compostela, la muestra se ha trasladado este fin de semana a la ciudad de Tui, en la frontera portuguesa, donde podrá ser visitada hasta mediados del mes próximo.
swissinfo, José M. Wolff, Madrid
Peremigración es una exposición sobre la migración organizada por MiraSuiza en colaboración con la Consejería de Cultura del gobierno gallego.
Está diseñada en forma de cruz con un patio central y cuatro áreas temáticas que evocan diferentes huellas del fenómeno migratorio.
El juego del futbolín es el elemento destacado para conseguir expresar de manera pragmática el contenido de la exposición.
La muestra estará expuesta hasta el 12 de diciembre en la ciudad de Tui.
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