Kaspar Villiger: “Suiza existe”

Kaspar Villiger exhorta a apostar por un futuro positivo. swissinfo.ch

El ejecutivo helvético lanzó un llamado a la confianza. La Confederación, dijo, cuenta con las cartas necesarias para afrontar sus desafíos.

“Quiérase o no, ‘Suiza existe’. Es cierto que tenemos problemas, pero no más que otros países comparables”, destacó el presidente en su mensaje a los suizos que radican en el extranjero, con motivo de la Fiesta Nacional.

Los suizos celebran este 1 de agosto el Pacto celebrado en la pradera de Grütli, en 1291, entre los cantones de Uri, Schwyz y Unterwald, que dio pie al nacimiento de la Confederación Helvética.

En las palabras que Villiger dirigió a sus conciudadanos con residencia fuera del país y que constituyen lo que se denomina “La Quinta Suiza”, reconoció que la nación está natural y constantemente enfrentada a los desafíos que le plantea la mundialización.

Empero, destacó que su país “dispone de las cartas necesarias para triunfar sobre las dificultades que se le presentan y para asegurar un futuro coronado de éxito”.

No obstante, convino en que la severa competitividad a escala mundial impone el concurso de mayores esfuerzos, entre otros, la revisión constante de las relaciones helvéticas con la Unión Europea.

“Pero, sobre todo, tendremos que conservar la capacidad de resolver nuestros problemas políticos, económicos y sociales internos. Porque es bajo esta condición que nuestro pequeño país podrá mantener su rango frente a la competencia internacional”, acotó el mandatario suizo.

Una mayor defensa

Al dirigirse a sus compatriotas que habitan otros países que aquel que los vio nacer, Villiger aludió a la decisión ciudadana de adhesión a la ONU y dijo que esa medida permitirá defender los intereses de Suiza en el plano internacional.

El mandatario hizo un somero resumen de la situación de Suiza en la década pasada. Se refirió a la prolongada recesión que sufrió el país, al creciente desempleo y a la falta de control de las finanzas, a las críticas que suscitó el comportamiento de la Confederación durante la Segunda Guerra Mundial, análisis que calificó de doloroso pero del que el país salió reforzado.

En ese contexto, recordó la triste célebre presentación del país en la Exposición Universal de Sevilla con el lema “Suiza no existe”.

También pasó lista de algunos de los desafortunados acontecimientos que conmovieron al país el año pasado: la masacre de Zug, el colapso de Swissair, “la pérdida del sentido de la mesura y las fallas de algunos dirigentes de empresa”, el prolongado cierre del túnel del Gotardo, eje fundamental de comunicación para Suiza y el resto del continente.

“¡No se impresionen!”

“Les invito en primer lugar a no dejarse impresionar demasiado por las críticas a las cuales Suiza debe hacer frente. Nuestro país sigue disponiendo de muchas bazas”, subrayó el presidente de la Confederación Helvética.

Agregó que aunque Suiza atraviesa de nuevo una fase durante la cual su ánimo es menos bueno que su estado general, en el fondo, la situación es buena e incluso excelente en comparación internacional. Por ello, invitó a sus conciudadanos a pensar con optimismo en el futuro.

Kaspar Villiger aseguró que la recesión de los años 90 movilizó a las fuerzas de la nación y dijo que la política y la economía supieron sacar provecho de la crisis con lo que el crecimiento se ha reactivado, el desempleo ha disminuido y ha mejorado el estado de las finanzas federales, además del esfuerzo solidario que permitió la creación de una nueva aerolínea de bandera.

El jefe del Ejecutivo reconoció y agradeció la labor de sus compatriotas que viven en otras latitudes como lazos de unión entre Suiza y el extranjero y les invitó a mantener su participación, mediante las urnas, en los procesos de decisión de la Confederación Helvética.

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