El ritmo de crecimiento de la economía suiza se torna más lento. En el segundo trimestre 2000 el Producto Interior Bruto (PIB) creció sólo un 2,5 por ciento con relación a los tres meses precedentes, señala la Secretaría de Estado de Economía (Seco).

Las cifras hechas públicas este jueves por la Secretaría de Estado de Economía (Seco) se sitúan por debajo de los pronósticos de los expertos, que preveían un PIB superior al 3 por ciento para el segundo trimestre del año.

Pero, aunque a un ritmo más lento, la coyuntura helvética se mantuvo gracias la demanda externa y al consumo interno, señala la Seco.

Entre abril y julio, las exportaciones crecieron un 4,6 por ciento, pero ese aumento corresponde a la mitad del volumen registrado en los primeros tres meses del año (8,8 por ciento). Asimismo bajaron las importaciones (-1,3 por ciento), que en el trimestre precedente habían registrado un aumento del 4,1 por ciento.

También el consumo, el factor más importante del PIB, creció menos que en el primer trimestre (-0,4 por ciento). Los suizos compraron menos muebles, ropa y coches, según la Seco.

Pese a esta pérdida de dinamismo, la Comisión para asuntos coyunturales (órgano consultivo del Gobierno) estima que las perspectivas de la economía suiza continúan siendo favorables. La subida del precio del petróleo tendrá repercusiones sobre la inflación. Y la estricta política monetaria del Banco Nacional frenará ulteriormente el crecimiento.

El Producto Interno Bruto (PIB), considerado como el indicador más importante de la evolución económica de un país, corresponde al valor total de los bienes y servicios producidos a escala nacional en un período determinado (normalmente un año).

swissinfo y agencias

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