La Quinta Suiza es nuestra mejor embajadora

Keystone

La nueva presidenta de la Confederación Helvética pondera el papel de los suizos en el extranjero y afirma que seguirá conversando con ellos en sus viajes durante 2007.

Micheline Calmy-Rey insta a la población suiza a reflexionar sobre los lazos que les une. Una cohesión amenazada por la precariedad y las disparidades sociales. Entrevista.

En virtud de la votación del pasado 13 de diciembre en el Parlamento (147 de 192 votos emitidos), Micheline Calmy-Rey ocupa la presidencia rotativa de la Confederación Helvética en 2007.

La ministra socialista de Relaciones Exteriores explica a swissinfo sus prioridades de jefa de Estado.

swissinfo: Uno de los papeles de la Confederación es ir hacia la población suiza. ¿Tiene usted algunas iniciativas y un mensaje particular para los suizos en el extranjero?

Micheline Calmy-Rey: Yo quisiera agradecer a los suizos y suizas en el extranjero. Ellos son nuestros mejores embajadores y la mejor imagen que puede dar este país.

Por esta razón es importante encontrarse con ellos y escucharles. Esta es una tarea que ya cumplo como ministra de Relaciones Exteriores y que por supuesto seguiré haciendo durante mis viajes en 2007.

swissinfo: Como testimonian las discusiones en el seno del Consejo de Derechos Humanos, la brecha Norte-Sur condiciona mucho las relaciones internacionales. ¿Qué rol ve usted para Suiza en este contexto?

M.C.-R.: En lo que concierne al Consejo de Derechos Humanos, Suiza practica una activa política de mediación. Este Consejo no debe ser un tribunal que compita con el Consejo de Seguridad de la ONU. Por el contrario, lo que debe hacer es favorecer una asociación para mejorar el respeto de los derechos humanos.

Al no practicar la política de ‘doble standard’, denunciando las violaciones de los derechos humanos donde éstas ocurren, Suiza trata de construir puentes. Un rol natural para un país neutro, sin agenda encubierta.

Además, Suiza tiene como prioridad, en política internacional, el respeto del derecho. Nosotros trabajamos particularmente con Naciones Unidas para que hayan reglas y sean respetadas. Al mismo tiempo nos empeñamos en mantener buenas relaciones bilaterales con todos los Estados, incluyendo con aquellos en conflicto.

Eso quiere decir que no somos los únicos mediadores. Otros países con más medios que Suiza y organizaciones internacionales también desempenan este papel.

swissinfo: Hace algunos años lanzó usted una red internacional de mujeres ministras. ¿Piensa fortalecer esta red?

M.C.-R.: Esa red de mujeres ministras de Relaciones Exteriores nació de la voluntad de encontrarse, intercambiar experiencias y plantear algunos asuntos que atañen a las mujeres.

Nosotras nos reunimos dos veces por año, al margen del Consejo de Derechos Humanos y de la Asamblea General de Naciones Unidas. En 2005, por ejemplo, obtuvimos en Ginebra la Oficina de la Convención contra las Discriminaciones a las Mujeres.

swissinfo: ¿Tuvo contactos con el nuevo secretario general de la ONU y cómo ve usted la colaboración con él?

M.C.-R.: No veo ninguna razón por la que las muy buenas relaciones establecidas con Kofi Annan no puedan continuar con su sucesor Ban Ki-moo.

Ginebra alberga la sede europea de Naciones Unidas. Por ende, hay un nexo con el secretario general de Naciones Unidas. Por otra parte, Suiza se ha dedicado mucho en el proceso de reforma de la ONU, sea en los métodos de trabajo del Consejo de Seguridad o en la creación del Consejo de Derechos Humanos.

swissinfo: ¿Significará el débil score de su elección una presidencia difícil en términos de relación de fuerzas políticas?

M.C.-R.: Aparentgemente tuve un mal resultado. Pero yo considero este resultado como un cumplido. Eso significa, en efecto, que Suiza tiene una verdadera política exterior, y que algunos parlamentarios expresaron en esta ocasión su desacuerdo con esta política.

swissinfo: Christoph Blocher, miembro del gobierno, ha confirmado su rol de líder de la UDC (Unión Democrática de Centro-derecha dura). ¿Qué hará la presidencia para defender la colegialidad y la búsqueda de consenso en un año electoral?

M.C.-R.: Un año electoral siempre tiene efectos muy particulares. Como fuere, la tarea de la presidencia de la Confederación es conducir el gobierno colegidado y velar porque éste tome sus decisiones correctamente, dentro de una dinámica de grupo apropiada.

Eso quiere decir que la otra prioridad de mi mandato de presidenta es ir al encuentro de las suizas y los suizos. Pienso aprovechar al máximo esta oportunidad de escuchar a la población y transmitir sus preocupaciones y sus esperanzas al resto del gobierno.

Por mi parte, quisiera que las suizas y los suizos reflexionen en lo que les mantiene unidos. Como decía Denis de Rougemont, Suiza es una nación basada en la voluntad de vivir juntos. Con el federalismo y la democracia directa, nuestro país ha logrado asegurar la cohesión de sus diferentes componentes. Esa es una cualidad muy moderna que muchos Estados intentan conseguir.

Hoy en día, muchos suizos encaran grandes dificultades económicas, la precariedad o el desempleo. La brecha se agranda entre los altos y los bajos ingresos. Ahora bien, la paz y el equilibrio social son los elementos esenciales de la cohesión nacional.

Entrevista swissinfo, Frédéric Burnand, Ginebra.

Datos clave

La presidencia de la Confederación Helvética tiene la responsabilidad de dirigir el Consejo Federal (gobierno), la oportunidad de conversar con la población suiza y el papel de representar a Suiza en el mundo.

Ministra suiza de Relaciones Exteriores, Micheline Calmy-Rey desempeña en 2007 la presidencia rotativa de la Confederación, además de su mandato inicial (de ministra).

Nacida el 8 de julio de 1945 en Chermignon, cantón Valais, Micheline Calmy-Rey fue elegida al Consejo Federal el 4 de diciembre de 2002.