Nace Red de Mercados Ecológicos en Colombia
El proyecto cofinanciado por la Fundación Holcim promueve el comercio de bienes agrícolas a precios justos para los campesinos.
El país sudamericano reviste especial interés para el grupo cementero helvético ya que es uno de los mercados más rentables de América Latina.
El 2008 inició para los campesinos de Boyacá, Colombia, con nuevas oportunidades comerciales.
El 1 de enero entró en vigor una nueva Red de Mercados Ecológicos Campesinos que les garantizará un pago justo para sus productos a cambio del compromiso de aumentar su oferta de bienes orgánicos y de la garantía de no emplear niños o ancianos.
La iniciativa, desarrollada en coordinación con los pequeños productores, fue diseñada por la Fundación Holcim de Colombia y por la colombiana Asociación Agropecuaria de Productores (Agronit).
Su estructura propone eliminar intermediarios que encarecen los productos, al conectar al productor con el consumidor final.
Lazos entre productores
La Red de Mercados Ecológicos Campesinos operará todo el 2008 y se prevé que se expanda en el futuro.
“Los primeros pequeños productores beneficiados serán campesinos de municipios como Nobsa, Iza y Tibasosa, todos ubicados en Bocayá”, confirmó Sandra Hernández.
Al dar a conocer el proyecto, la directora de la Fundación Holcim Colombia aseguró que “esta propuesta de desarrollo productivo intentará simultáneamente convertirse en un atractivo para los pobladores y para el turismo local, a partir del interés que despierte una nueva fórmula de comercio en la que se conjugarán productos de alta calidad y precios interesantes”.
Adicionalmente, refirió Hernández, la red de mercados ha promovido la solidaridad y la creación de lazos personales y de trabajo entre los agricultores involucrados, que en muchos casos ni siquiera se conocían hasta hace poco tiempo.
Primera etapa
La primera etapa está prevista para el presente año y de acuerdo con los planes beneficiará en principio a 26 agricultores boyacenses. En la segunda mitad del año, según la Asociación Agropecuaria de Productores (Agronit), se sumarán otros 20 productores.
Si el proyecto marcha según lo previsto, se irán integrando paulatinamente diversos municipios y provincias para extender el beneficio a otras regiones colombianas.
Bocayá es una provincia conformada por 123 municipios que viven lo mismo del campo que de la ganadería, la pesca, el comercio y la artesanía.
Sin embargo, en el campo su fortaleza radica en la producción de papas, maíz, cebada, caña de azúcar, trigo y plátanos, productos que explican el 50% de economía agrícola de esta región.
Boyacá, proyecto integral
Boyacá es una de las regiones en las que más ha trabajado la Fundación Holcim en Colombia. Además de la nueva red de mercados, está en marcha una tríada de programas adicionales.
El más importante lleva por nombre ‘Nobsa’, se desarrolla en la vereda de Chámeza y se dedica a promover la formación de microempresas dedicadas a transformar la producción de breva y a incentivar su comercialización.
Simultáneamente, ha financiado y promovido el establecimiento de mercados artesanales producidos por estudiantes del Centro Juvenil Campesino Félix Gloor.
Y la Fundación Holcim trabaja también desde hace tres años con la Cámara de Comercio de Sogamoso en el desarrollo de la producción de muebles rústicos para exportación.
Granjas porcícolas
Otro proyecto de envergadura en Boyacá es el Programa de Mejoramiento de Producción Porcícola, que involucra a campesinos y estudiantes del colegio Sergio Camargo, municipio de Iza, en los que la función de Holcim –como fundación- es capacitar a los productores de porcinos.
Se les ofrece información sobre nuevas razas de animales, cruzas, alimentos alternativos, se financian cursos de contabilidad y se trabaja en el desarrollo de producción que cumpla con los criterios internacionales del comercio sustentable.
Las mujeres son uno de los principales flacos de estos programas, sobre todo en la región de La Carrera, en el municipio de Tibasosa, donde son ellas las que encabezan la producción de cerdos y las que generan empleo entre los vecinos.
Colombia para Holcim
El interés de Holcim en Colombia no es desinteresado.
A través de su fundación sencillamente devuelve, como reza el refrán: “Una de cal por las que van de arena…”.
Holcim ha sido acusada desde hace más de tres años de contaminar el caudal del río Tunjuelito como resultado de su operación cotidiana en las minas de Ciudad Bolívar.
Ciudad Bolívar es uno de los sectores más poblados y pobres de Bogotá, una región contaminada por plagas como la pobreza extrema y los enfrentamientos entre guerrillas.
Sin embargo, posee generosas minas de arena y grava, materia prima de la operación de Holcim en este mercado.
Actualmente, esta filial sudamericana produce más de 2 millones de metros cúbicos de cemento al año, gracias a los materiales calizos que obtiene en tierras colombianas.
Y Holcim es, de hecho, la segunda más importante de las 13 empresas cementeras que operan en Colombia, sólo antecedida en capacidad de producción por la francesa Lafarge.
El trabajo que realiza la fundación busca darle equilibrio a la relación comercial que el grupo guarda con los diversos países en los que opera y se enfoca en la promoción del desarrollo social, una ecuación que funciona y que seguirá dando de que hablar en el 2008.
swissinfo, Andrea Ornelas
Holcim tiene presencia en 70 países, posee 400 fábricas y tiene 45.500 empleados.
Las ventas del grupo en 2007 superaron los 13.500 millones de francos suizos.
Boyacá, sede de los mercados ecológicos, cuenta con 13 provincias y 123 municipios.
Fundación Holcim tiene presencia en 20% del territorio boyacense.
La cementera Holcim fue fundada hace poco más de un siglo en Holderbank, cantón Argovia.
Holcim llegó a América Latina en 1951, primero a Brasil, después a México, y en los años 60 se estableció en Costa Rica, Colombia, Argentina y República Dominicana.
La Asociación Agropecuaria de Productores y Comercializadores (Agronit) fue creada en Boyacá para apoyar en principio a pequeños productores porcinos a través de apoyos del sector privado, que buscan el mejoramiento genético y de granjas.
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