El camino de Kandinsky hacia la abstracción

El Kunstmuseum de Basilea propone una exposición consagrada al célebre pintor ruso, fundador y el teórico del arte abstracto.
Varias decenas de lienzos revelan el trabajo titánico del pintor para lograr un arte nuevo, en el curso de composiciones complejas y de un estilo sin cesar renovado.
Entre 1908 y 1921, período cubierto por la exposición del Kunstmuseum de Basilea, concebida en colaboración con la Tate Modern de Londres, Wassily Kandinsky desarrolla un arte revolucionario, que renuncia a la figura.
Los colores desempeñan en lo sucesivo un papel esencial, el rojo que actúa como una «fuerza inmensa casi conciente de su objetivo», el azul, la expresión por excelencia de la espiritualidad, el color amarillo que suena como una trompeta.
Unos sesenta lienzos ilustran el progreso del pintor, que no se lanza de un solo movimiento a la abstracción, sino que conserva, durante años, motivos reconocibles, que destacan sus composiciones.
Hacia la dramatización
La primera sala está dedicada a las obras creadas en Murnau, donde el pintor pasa un tiempo con su compañera Gabriele Münter. Las reminiscencias del folklore ruso se enrarecen, el artista pone el énfasis en el enredo de las casas, en la sencillez de un camino que divide el espacio a disposición, en algunos personajes tomados de entre todas esas superficies coloreadas que crean ritmo y dinamismo.
Luego, al aproximarse la Primera Guerra, son adoptados motivos dramáticos que aportan con ellos su vigor formal: cañones que lanzan matas de humo, jinetes y ángeles que anuncian el último juicio, todo tratado de la misma manera que las manchas y los ángulos en apariencia privados de todo significado.
De la oscuridad soviética a la luz cósmica
Iniciada la guerra, Kandinsky es obligado a regresar a su país natal, dónde asiste a la Revolución de octubre y participa en la elaboración de una enseñanza del arte nuevo. Forzosamente decepcionado por el rumbo que toman las cosas, en el plano artístico, deseoso de conservar su libertad, emigra de nuevo en 1921, para ir a enseñar en Bauhaus.
Esos años rusos producen cuadros más sombríos y totalmente abstractos, donde las formas y los tintes se combinan para producir un sentimiento general, de crepúsculo y de agitación.
Y luego, las composiciones se vuelven más depuradas, más geométricas, el fondo se aclara. Es entonces el alba de un estilo nuevo, y la pintura de Kandinsky, en referencia al cosmos, propondrá un ballet magnífico de asteroides.
swissinfo, Laurence Chauvy
La exposición ‘Kandinsky, Pinturas 1908 – 1921’ se encuentra en el Kunstmuseum de Basilea hasta el 4 de febrero de 2007. Previamente estuvo espuesta en la Tate Modern de Londres.
Comisarios de la exposición: Bernhard Mendes Bürgi, Hartwig Fischer.

En cumplimiento de los estándares JTI
Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI
Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.
Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.