De Rembrandt a Warhol
El Museo de Arte de Zürich presenta, a manera de balance de este año 2001, la exhibición denominada 'Tesoros pictóricos, lo mejor del Museo de Arte'.
Catalogada como una de las colecciones de arte más prestigiosas en Europa, el Museo de Arte de Zúrich presenta al público sus adquisiciones, reunidas después de largos años de paciencia y gusto por la pintura, la escultura y los trabajos realizados en papel.
Una selección de ciento cincuenta obras maestras que nos llevan desde los cuadros claroscuros, armoniosos y dramáticos del siglo XVII del holandés Rembrandt Van Rijn, hasta las obras del artista pop norteamericano Andy Warhol, con sus latas de sopa “Cambell’s, ¿símbolo del consumo de la sociedad de masas?
Lo primero que uno se pregunta al ver esta exposición es: ¿Cómo se nutre un museo de arte y bajo qué circunstancias?
La actual colección del Museo de Arte de Zúrich es el resultado de una serie de valiosas adquisiciones y donaciones, que en el transcurso de varias generaciones fue engrosando sus fondos y reservas gracias al apoyo financiero y al interés de ciertos coleccionistas y conservadores de arte.
Entre ellos, la contribución de la fundación Gottfried Keller en 1890, de Heinrich Shulthess von Meiss, interesado en arte suizo y alemán en 1898 y de Alfred Rüetschi, quien agrandó las reservas del museo en 1917.
Pero también en la lista se encuentra Hans Schuler, un apasionado de la pintura impresionista y postimpresionista. En 1920 donó al museo varias telas de pintores tales como Renoir, Cézanne y Van Gogh.
El Dr. Hans E. Mayenfusch fue otro hombre que enriqueció los haberes del museo, adquiriendo obras de artistas suizos.
Poco después, el museo se vio enriquecido con pintura holandesa del siglo XVII: paisajes, naturalezas muertas y retratos. Así como también con cuadros del barroco italiano, y en 1965 se abre la fundación de obras de Alberto Giacometti.
Otros conservadores de arte fueron fundamentales para agrandar y mejorar las salas de exposición de este museo como Emil G. Bührle o Nelly Bär. Este último donó a la colección de Zúrich esculturas del francés Augusto Rodin.
Dejando de lado a los precursores del basto arsenal artístico del museo, se abre la invitación para admirar sus tesoros, en los que destacan obras de artistas franceses tales como Gericault, Corot, Monet, Toulosse-Lautrec, Van Gogh, Manet, Bonnard, Vuillard y Rodin.
El arte norteamericano no podía faltar: A la entrada de la exhibición salen al encuentro las obras de A. Warhol, Cy Twombly y M. Rothko. Sin olvidar ejemplos artísticos de manos de reconocidos nombres como Klee, Calder, Picasso, Kandinsky y Böcklin.
El arte suizo está representado dignamente con composiciones del pintor Johann Heinrich Füsli, o ‘El día que se levanta con cinco mujeres’ obra de Ferdinand Hodler, o los espléndidos paisajes alpinos de Giovanni Segantini, es una lástima que no se hayan presentado en esta muestra más creaciones de artistas helvéticos.
Sin embargo hay que decir que hacia 1980 el Museo de Arte, con el apoyo de valiosas colaboraciones, pudo reunir finalmente la más completa colección de documentos del movimiento intelectual de esencia subversiva, el dadaísmo, nacido en Zúrich hacia 1916.
La colección de tesoros artísticos del Museo de Arte de Zúrich estará abierta al público hasta el 6 de enero de 2002.
Araceli Rico, Zúrich
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