“Caracas es peligrosa, pero creo que exageran”
Silvia vive a caballo entre Venezuela y Suiza. A sus 84 años sabe de la delincuencia. En tres ocasiones trataron de arrebatarle la cartera en el país europeo. Una reciente clasificación sitúa a Caracas como la ciudad más peligrosa del mundo, pero la Confederación no es inmune al delito.
“La seguridad que hay en Suiza y en Europa, subraya, no la hay en América Latina. Sin embargo, nos pregunta con un atisbo de picardía, “¿sabe dónde trataron de asaltarme tres veces…? ¿En Milán?, aventuramos. “¡En Zúrich!”, responde divertida.
Atribuye lo anterior a una cuestión de suerte porque, como insiste, “la delincuencia que hay en Suiza, en Europa en general, no es comparable con la que existe en Venezuela, ni en el resto de América Latina”.
Silvia* vivió 30 años en Venezuela, hasta hace cinco, cuando volvió a Suiza. Pero desde entonces pasa siete meses por año en ese país sudamericano y el resto en su Zúrich natal.
La contactamos por teléfono en su lugar de recreo en un poblado de Los Andes para pedirle su opinión sobre el reciente listado de una organización mexicana que ubica a Caracas como la ciudad más violenta del mundo.
“¿Cómo pueden saber eso? “Caracas es peligrosa, aunque no por todas partes, pero, no creo que sea la más peligrosa? ¡Me parece una exageración!”
Tomar precauciones
En virtud del trabajo de su marido, ingeniero industrial de San Gall, esta maestra zuriquesa ha vivido en Bogotá (1966 a 1967), Lima (1968 a 1978), Caracas (1978 a 1998) y Valencia (Venezuela, de 1978 a 2011), además de que la pareja ha paseado por ciudades de Brasil, Argentina y México.
¿En alguno de esos lugares se sintieron especialmente en riesgo? “No, responde convencida. Pero debo decir que siempre tomamos precauciones. Nunca salimos con objetos ostentosos y evitamos pasear de noche”.
Recuerda que desde su llegada a Bogotá les recomendaron no salir después de las seis de la tarde. “Pero igualmente es algo que no hacemos porque no somos trasnochados”.
La carterista en Zúrich
En tres ocasiones, Silvia ha sido objeto de intentos de robo. En las dos primeras se encontraba en la central ferroviaria de Zúrich. En la tercera, en 2011, en una parada del tranvía cercana a la misma estación.
“Una joven de unos 18 años trató de arrancarme la cartera. Forcejeamos. Grité, nadie se acercó pero la muchacha se fue.” Recuerda que acudió a presentar la denuncia a la oficina de la policía de la estación y que los guardias que la atendieron no pudieron evitar reírse.
“Me dijeron: ‘usted es la quinta persona que ha venido a quejarse durante el día, pero usted es la única que aún tiene su bolsa’”.
A través de la línea telefónica nuestras risas se entrecruzan. “Pero, claro, advierte. Era una cartera llamativa. Una cartera que nunca habría usado en ningún país de América Latina”.
En América Latina, con cuidado
Dice que tampoco habría viajado por esa región como lo hizo en el año 2000 en la India, “sola y con una mochila”.
Desde 2011, Silvia y su marido viven a caballo entre Zúrich y Venezuela. En esta última, la mayor parte entre la playa y la montaña, y poco tiempo en la capital, “y no por miedo, sino porque ya no nos gustan las grandes ciudades”.
Sin embargo, no minimiza el problema de la delincuencia. “Yo creo que los índices de violencia se han incrementado en todo el mundo, incluida América Latina. Tengo ahijados en Lima y nos cuentan que en el barrio en el que viven, un lugar desfavorecido, cada rato hay atracos y hay muertos”.
¿Pero, cómo pueden determinar qué ciudad es la más peligrosa?
Silvia no es la única escéptica…
Una fuente opaca
El 25 de enero pasado, una organización mexicana denominada Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal (CCSPJP)Enlace externo publicó su ‘Ranking de las 50 ciudades más violentas del mundo’ en 2015. Caracas encabeza la lista, seguida por San Pedro Sula, San Salvador, Acapulco y Maturín (Venezuela). El informe fue retomado por diversos medios en diversos países.
Bajo el título, ‘Caracas, ¿la ciudad más violenta del mundo?, el diario francés ‘LibérationEnlace externo’ señala que el último informe de la Organización contra las Drogas y el Crimen de la ONU (ONUDC), ‘Global Study on Homicide’Enlace externo, a lo largo de sus 166 páginas de datos estadísticos no proporciona evaluaciones por ciudades, ni por países. El CCSPJP sí lo hace, pero “¿es una fuente fiable?”
El organismo mexicano, según él mismo, privilegia la información oficial para la elaboración de su informe y, de no poseerla, se basa en informaciones de los medios locales “una solución poco satisfactoria” para ‘Libération’ que destaca igualmente la ausencia en el listado “de ciudades conocidas por su violencia como Nairobi (Kenia), Karachi (Pakistán) o Mogadiscio (Somalia)”.
La web del CCSPJP ofrece una mínima información sobre el organismo y ninguna acerca de su financiamiento. Su ideología, según ‘Libération’, es el ‘manodurismo’, política de mano de hierro “que ha servido para legitimar más de un golpe de Estado” y que en el caso de la desaparición de los 43 estudiantes en Ayotzinapa (09.14), mostró su apoyo a las fuerzas armadas, pese a las acusaciones en su contra por omisión.
Indica igualmente que el director de la entidad mexicana, José Antonio Ortega, felicitó al expresidente colombiano, Álvaro Uribe, principal detractor del proceso de paz, por su política intransigente respecto a las FARC.
Para ‘Libération’, “el empleo de tales estadísticas no está libre de sospechas. Más allá del Atlántico y en Europa”.
*Nombre completo de conocimiento de la redacción.
Homicidios en algunos países
Estadísticas del Banco MundialEnlace externo sobre homicidios intencionales por cada 100 000 habitantes en 2011, 2012 y 2013:
América Latina: Venezuela 54-48 (sin dato para 2013); Bahamas 35 -30; Belice 39-45; Brasil 23-27-27; Colombia 34-31-32; El Salvador, 70-41-40, Honduras 92-91 84, Guatemala 39-35 y México 23-22-19.
Europa: Suiza, Suecia, República Checa, el Reino Unido y Portugal, 1 para los tres años y Bélgica 2-2-2.
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