Las trabas de la pobreza

Los niños que crecen en un medio sociocultural desfavorecido se ven privados de muchos derechos en ámbitos como la salud, la formación o el bienestar social y psicológico.

Son datos preocupantes, ya que la pobreza se transmite de generación en generación.

“Suiza descuida a sus jóvenes. Trabajamos con cifras aproximativas, mientras que la pobreza pone en peligro el futuro de un segmento de la población”, enfatiza Franz Ziegler, secretario general de la Asociación Suiza para la Protección de la Infancia (ASPI).

Según él, “ser pobre en un país rico significa exclusión social y un gran riesgo para el desarrollo de los jóvenes”.

Numerosos estudios realizados en los países vecinos demuestran, de hecho, el enorme impacto psicosocial que tiene la pobreza en la evolución de los niños.

Suiza, en cambio, dispone sólo de un estudio sobre esta problemática, realizado por encargo de la Comisión Federal de Coordinación para los Asuntos Familiares (COFF) y publicado en 1998.

“Los investigadores de la Oficina de Estudios de Política Laboral y Política Social (BASS) han demostrado claramente que la pobreza constituye un obstáculo indiscutible para el buen funcionamiento del sistema familiar”, señala Anouk Friedmann, secretaria de la COFF.

Un estilo de vida

Aislamiento social, estrés permanente, clima de violencia: son trabas que se enfrentan los niños que crecen en el seno de familias desfavorecidas.

“Conviven con unos padres cansados de ganarse la vida en trabajos fatigosos, a menudo en viviendas demasiado pequeñas o de mala calidad”, explica Frances Trezevant, responsable de Comunicación de la Ayuda Obrera Suiza (AOS).

“La pobreza no es únicamente un problema de dinero, sino todo un estilo de vida”, precisa.

Una opinión que comparte Anouk Friedmann. “Las familias que viven en condiciones precarias no tienen más remedio que renunciar a un estándar de vida al que todo ciudadano debe poder aspirar en un país rico”, puntualiza la secretaria de la COFF.

Anouk Friedmann cita como ejemplo una investigación publicada por la Oficina Federal de Estadística en 1992.

“El 11% de las personas con ingresos bajos habían optado por no acudir al dentista. En mi opinión, es un dato muy ilustrativo”, señala.

Problemas de salud

“‘Los pobres viven menos tiempo’, es el título muy explícito de una investigación de Caritas publicada el año pasado”, afirma Frances Trezevant.

“Indica que los hombres criados en un medio sociocultural desfavorecido viven 4,4 años menos, con relación a sus congéneres con un nivel elevado de formación e ingresos.”

El estudio destaca asimismo que vivir en la precariedad es un factor de riesgo para la mortalidad infantil, los accidentes, las enfermedades respiratorias, la obesidad o el bajo peso al nacer.

“Es triste tener que decirlo tan bruscamente, pero nacer en una familia pobre es un mal punto de partida para la vida”, enfatiza Frances Trezevant.

La encargada de Comunicación de la AOS recuerda también que los niños desfavorecidos suelen ser iniciar la escolarización más tarde, sus notas son peores y, por lo general, no acceder a una formación superior.

“Es por ello que la pobreza se transmite de generación en generación”, concluye Frances Trezevant.

swissinfo, Vanda Janka
(Traducción: Belén Couceiro)

Muchas organizaciones defensoras de los derechos de la familia piden reforzar el sistema de subsidios familiares y aumentar las prestaciones en función de los ingresos.

Asimismo solicitan la creación de estructuras aptas para acoger a los niños y escolares.

La mayor parte de las organizaciones reclama una mayor igualdad fiscal y que las familias con ingresos por debajo del mínimo vital estén exentas de pagar impuestos.

Datos clave

La esperanza de vida de los suizos pobres es menor, según un estudio de Caritas (2002):
Población masculina: 4,4 años menos
Población femenina: 3-4 años menos