UE da luz verde a nuevas negociaciones con Suiza
La Unión Europea (UE) está dispuesta a entablar una nueva ronda de negociaciones con Suiza.
En la agenda figuran la adaptación del acuerdo bilateral sobre la libre circulación de personas y la contribución financiera de Suiza a la ampliación.
El comisario Chris Patten se dispone a remitir una carta a la jefa de la diplomacia helvética, Micheline Calmy-Rey, para comunicarle que la Comisión Europea ha recibido el mandato del Consejo de Ministros de entablar negociaciones con Berna.
La noticia, comunicada este martes (06.05.) no es una sorpresa. Con la ampliación de la Unión Europea (UE), los siete acuerdos bilaterales suscritos con Suiza, en vigor desde junio del 2002, se aplicarán automáticamente a los nuevos países miembros de la UE. A excepción del acuerdo sobre la libre circulación de personas, que será objeto de renegociación.
Ticket de entrada
La renegociación no debería plantear mayores problemas. El gobierno helvético ya ha calificado de “paso importante y ventajoso para Suiza” la extensión de los acuerdos suscritos con Bruselas a los nuevos miembros de la Unión Europea (UE).
La segunda demanda de los Quince es más delicada. La UE estima que Suiza sacará beneficios sustanciales de la ampliación del mercado interior. Y, por esa razón, Bruselas reclama a Berna una especie de ‘ticket de entrada’ en forma de contribución financiera.
La UE aplicó el mismo procedimiento a los tres países que conforman el Espacio Económico Europeo (EEE): Noruega, Islandia y el Principado de Liechtenstein. Las negociaciones entabladas en enero pasado todavía no han llegado a término.
Cuotas Polonia
Uno de los asuntos pendientes son las cuotas de Polonia relativas a la importación de pescado.
Por el contrario, Noruega ya ha aceptado pagar cerca de 223 millones de euros (335 millones de francos) cada año al fondo comunitario de cohesión económica y social.
Berna sigue con atención las negociaciones en curso, que podrían servir de base para las futuras conversaciones bilaterales con los Quince. En Bruselas se espera que la contribución helvética al fondo sea “comparable” a la que se ha comprometido a pagar el Gobierno de Oslo.
La Comisión Europea considera que Suiza tiene esa “obligación moral”. Según un alto funcionario, “será difícil para Suiza justificar una negativa y convertirse en el único estado rico que no asume sus responsabilidades hacia países del antiguo bloque soviético.”
Generosidad helvética
La Oficina de Integración en Berna espera recibir la solicitud oficial de Bruselas antes de anunciar su posición.
No obstante, su portavoz, Adrian Sollberger, recuerda que el Gobierno suizo está dispuesto a negociar la adaptación del acuerdo sobre la libre circulación de personas y que está ultimando la redacción de su mandato de negociación.
Para el Consejo Federal (Gobierno), la ampliación representa “un paso importante y necesario para la economía suiza”.
Sea como fuera, Berna no tiene prácticamente más opción que aceptar renegociar el acuerdo. En caso contrario, corre el riesgo de que la UE invalide éste y los otros seis acuerdos sectoriales.
Adrian Sollberger se muestra más cauteloso al referirse al segundo expediente. No hay una base jurídica para tal demanda ni en la primera ronda de negociaciones ni en la segunda, subraya el portavoz.
Asimismo precisa que Suiza se ha mostrado generosa con los países del este europeo, a los que destinó casi 2.000 millones de francos en ayuda entre los años 1990 y el 2002. Y la intención de Berna es seguir contribuyendo a la solidaridad europea.
swissinfo, Barbara Speziali, Bruselas
(Traducción: Belén Couceiro)
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