Zúrich somete a referéndum la exclusión escolar
Para enfrentar el problema de la indisciplina, los cantones aplican leyes que autorizan a los directores a expulsar alumnos desordenados.
En votación popular los padres decidirán el domingo (24.11) en Zúrich si aceptan o no estas nuevas medidas.
El tema de la exclusión escolar es relativamente nuevo en el sistema educacional suizo, y comenzó aplicarse en la década de los años 90 ante el aumento de comportamientos casi delictivos de alumnos problemáticos. Pero fueron medidas de suspensión provisoria y se privilegió el diálogo con los padres, como en el cantón de Ginebra.
En el caso de Zúrich, si el pueblo acepta la aplicación de la ley, las escuelas contarán con un dispositivo legal y obligatorio que permitirá a los profesores alejar de las aulas a los alumnos cuyo comportamiento se juzgue inadaptado a los objetivos escolares.
Medidas diferentes según los cantones
Estas leyes de exclusión se aplican ya en los cantones de Vaud, Berna y San Gall. En Berna la ley va mucho más lejos pues permite expulsar del colegio a los alumnos por un tiempo superior a los dos meses y sin medidas de acompañamiento, como la asignación de un educador especializado.
Vaud es uno de los raros cantones que autoriza la expulsión definitiva durante la escolarización obligatoria. Ese dispositivo existe en la ley escolar desde 1999, pero sólo se ha aplicado en casos excepcionales, explica Cilette Cretton, directora del Departamento Cantonal de la Formación.
La directora precisa que la opción seguida por los educadores ha sido la suspensión provisoria seguida de la búsqueda de soluciones más pedagógicas, como el envío de los alumnos difíciles a clases terapéuticas en centros especializados.
En Vaud existen tres tipos de medidas disciplinarias aplicadas por ley; la suspensión provisoria, que puede ser de 3 días a 3 semanas según los casos; la asignación de tareas extraescolares específicas, y cuando se trata de alumnos violentos, la internación por algún tiempo en establecimientos especializados.
En el cantón del Valais, uno de los más flexibles junto al de Ginebra, los alumnos indisciplinados son cambiados de clase, en un primer tiempo, y enseguida de colegio. “Cuestión de darle al estudiante una nueva posibilidad de comenzar de cero”, señala el psicólogo escolar Maurice Nanchen.
Medida cuestionada
En general la exclusión definitiva de los alumnos considerados “casos especiales”, es combatida por la mayoría de los psicopedagogos y justifican la medida sólo en casos extremos, cuando es la última posibilidad que existe para solucionar el problema, sostiene por su parte la profesora Anne Appert.
En el caso de Zúrich, el grado de violencia escolar llegó a tal extremo que las instituciones especializadas se han visto desbordadas y para aplicar medidas disciplinarias, necesitan un marco legal. Es la ley que será sometida a votación popular este domingo, abriendo un debate nacional.
La Conferencia de Directores de la Instrucción Pública de Suiza, trabaja sobre el tema y se espera para el próximo año la publicación de un informe con una serie de recomendaciones y medidas relacionadas a la indisciplina escolar.
swissinfo
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