En el corazón de Zúrich se encuentra la discreta capilla de Santa Ana. Aquí todavía un campanero se ocupa de repicar manualmente las campanas para convocar a los fieles los domingos y los días festivos. Visita.
En las últimas dos décadas, Rudolf Brauchli (60) se ha encargado de esa tarea, turnándose con un colega. Brauchli se ha convertido así en el último campanero del cantón de Zúrich que se ocupa manualmente de manipular las campanas.
Se trata de un oficio en vías de extinción. En el resto de los centros de culto los carrillones funcionan electrónicamente.
La capilla de Santa Ana, situada en la otrora fundidora de campanas Füssli, pertenece a la Sociedad Evangélica del cantón de Zúrich. Fue construida en 1910 por los arquitectos Bischoff y Weidli en un inmueble clasificado actualmente como monumento histórico.
Mathilde Escher, hija del artífice de la empresa industrial Wyss, fundó la capilla.
swissinfo.ch acompañó a Rudolf Brauchli al campanario para anunciar el culto del domingo.
Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.
Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.
Contenido externo
No se ha podido registrar su suscripción. Por favor, inténtalo de nuevo.
Casi hemos terminado... Necesitamos confirmar su dirección de correo electrónico. Para completar el proceso de suscripción, por favor pulse sobre el enlace del correo que acabamos de enviarle.
Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.
Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.