Schaffhausen es custodiada por una mujer. Es la primera vez en la historia de la fortaleza de Munot, emblema de la ciudad más septentrional de Suiza, situada en la frontera con Alemania.
Desde hace dos años, Karola Lüthi es la guardiana de MunotEnlace externo. Es una mujer de cincuenta años plena de vitalidad. “Desde hace 20 años quería realizar este trabajo. En ese momento no era fácil. ¿Una mujer? ¡Nunca!”, narra desde la mesa en el apartamento de la torre. Pero hace tres años vio un anuncio para el puesto de “guardián de la fortaleza de Munot”. Habló con su marido porque se buscaba una pareja. “Presenté la candidatura del siglo porque quería absolutamente este trabajo”. Y sucedió: Fue seleccionada entre 80 aspirantes.
El orgullo de Schaffhausen
Munot fue construida en el siglo XVI como fortaleza y es el punto de referencia de Schaffhausen. Domina la pequeña ciudad desde las alturas. Sin embargo, ya en la época en que fue erigida era considerada como una construcción obsoleta desde el punto de vista militar. Se utilizaba para la vigilancia de la ciudad en casos de ataques o de incendios. El guardián de Munot, que vivía con su familia en el apartamento de la torre, tenía una vista panorámica en todas las direcciones y debía tocar la campanaEnlace externo para dar la alarma en caso de peligro. Además, cada noche a las 21 horas, la echaba al vuelo durante un cuarto de hora. Al final de los tañidos, las puertas de la ciudad eran cerradas. Las tabernas cerraban también y la gente tenía que irse a casa. La quietud envolvía a la ciudad.
El ritual de cada noche
Incluso hoy, Karola Lüthi toca la campana todas las noches a las 21 horas, durante cinco minutos. Ese ritual se ha convertido en un hábito para la gente de Schaffhausen. “Después del toque hay que ir a la cama”, dicen los padres a los niños. Para la pareja Lüthi se trata de una tarea de 365 días por año. Eso significa planificar con mucha antelación las vacaciones y las idas al cine.
Deberes y placeres
Por supuesto, las labores de la guardiana de Munot son muy variadas: Cuidado y mantenimiento de las instalaciones, alimentación de los ciervos que viven en los alrededores, visitas guiadas para los numerosos visitantes y preparación de los actos culturales organizados por la Asociación MunotEnlace externo. “Trabajo 40%, mi marido 20% y 1% extra por la campana”, bromea Karola Lüthi. Gesticula con las manos mientras nos habla de su permanente interés por la historia y la manera en que vivía la gente antiguamente.
“Estamos muy aislados aquí arriba, eso debe sentar bien”. Otrora, no era bien visto que el guardián de Munot paseara por la ciudad. Se suponía que debía permanecer en la torre cumpliendo con su deber. Hoy, ya no es así, señala Lüthi. Los habitantes de Schaffhausen le dan la bienvenida y se complacen de que una mujer vele por la ciudad.
Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.
Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.
Leer más
Mostrar más
Recorrido por joyas arquitectónicas suizas poco conocidas
Este contenido fue publicado en
La ‘Guía de Arte e Historia de Suiza’ llega a su edición número mil este mes de septiembre, un momento propicio para recorrer, a través de las imágenes de archivo de la colección más vendida del país, una serie de monumentos poco conocidos, pero no menos espectaculares. El milagro azul Los apasionados suizos de los…
Este contenido fue publicado en
La historia se desarrolla en el poblado de Guarda, en la región de la Baja Engadina, en el cantón de los Grisones, donde cada año, el 1° de marzo, los niños recorren las calles del pueblo con una campana para asustar al invierno y darle la bienvenida a la primavera. El pequeño Urs también quiere…
Este contenido fue publicado en
Castelgrande, Montebello, Sasso Corbaro: son los nombres de los tres castillos que figuran en el patrimonio mundial de la UNESCO desde 2000. Un reconocimiento que significó el relanzamiento del turismo en la región de Bellinzona. Los tres castillos están entre los más destacables testimonios de la arquitectura medieval de fortificaciones en Suiza.
Este contenido fue publicado en
Los castillos de Bellinzona están considerados entre los mejores ejemplos de arquitectura medieval en Suiza. De ahí que fueran incluidos en el patrimonio mundial de la Unesco. Las fortificaciones fueron levantadas principalmente por los Duques de Milán en el siglo XV para contener a los guerreros suizos. (Julie Hunt, swissinfo.ch)
Este contenido fue publicado en
Pascal Couchepin, presidente suizo, se sumó a la lista al reinaugurar el castillo medieval, ubicado a la orilla del Lago Léman, bajo su ‘nuevo aspecto’. Incluso en un día nublado de marzo, el castillo del siglo XI, construido en piedra, en la orilla este del lago, luce como lo que es, uno de los monumentos…
No se ha podido registrar su suscripción. Por favor, inténtalo de nuevo.
Casi hemos terminado... Necesitamos confirmar su dirección de correo electrónico. Para completar el proceso de suscripción, por favor pulse sobre el enlace del correo que acabamos de enviarle.
Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.
Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.