China culpa de un ciberataque contra empresa tecnológica a ‘hackers’ vinculados a Taiwán
Pekín, 27 may (EFE).- Las autoridades chinas atribuyeron un reciente ciberataque contra una empresa tecnológica en la ciudad suroriental de Cantón a un grupo de piratas informáticos con supuestos vínculos con el Partido Democrático Progresista (PDP, gobernante) de Taiwán.
La Oficina de Seguridad Pública del distrito cantonés de Tianhe publicó este martes los resultados preliminares de su investigación sobre el incidente, en los que se afirma que el grupo opera desde Taiwán y ha llevado a cabo actividades dirigidas contra más de un millar de sistemas de redes considerados sensibles en más de diez provincias chinas.
Además de la citada empresa, cuyo nombre no ha sido facilitado, las autoridades aseguraron que los atacantes han actuado contra sistemas relacionados con sectores como defensa, energía, hidroeléctrico, transporte y administración pública, recogió el diario local China Daily.
Los ataques se habrían realizado empleando herramientas de código abierto y técnicas como el envío masivo de correos electrónicos de suplantación de identidad, la explotación de vulnerabilidades conocidas, ataques de fuerza bruta para descifrar contraseñas y el uso de programas troyanos de desarrollo propio.
El equipo investigador apuntó además que, pese a los intentos del grupo por ocultar su origen mediante el uso de direcciones IP procedentes de países como Estados Unidos, Corea del Sur, Japón, Israel y Polonia, la investigación permitió reconstruir el proceso completo de los ataques y establecer su procedencia.
El profesor de la Universidad de Xiamen Zheng Jian, citado por el diario local Global Times, explicó que «el ciberespacio se ha convertido en uno de los campos de batalla importantes en la lucha contra la independencia de Taiwán», y acusó a las «fuerzas separatistas» de «perturbar el orden normal de funcionamiento económico y social» en China en el ciberespacio.
Taiwán se gobierna de forma autónoma desde 1949 bajo el nombre de la República de China y cuenta con unas Fuerzas Armadas y un sistema político, económico y social diferente al de la República Popular China, destacando como una de las democracias más avanzadas de Asia.
Sin embargo, las autoridades de Pekín consideran a Taiwán como una «parte inalienable» del territorio chino y no han descartado el uso de la fuerza para concretar la «reunificación» de la isla y el continente, uno de los objetivos a largo plazo trazados por el presidente chino, Xi Jinping, tras su llegada al poder en 2012.
El Gobierno de Taiwán, liderado por el PDP, una formación de tendencia soberanista, defiende que la isla ya es de facto un país independiente y sostiene que su futuro solo puede ser decidido por sus 23 millones de habitantes. EFE
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