Continúa el retroceso democrático en Georgia, denuncia AI

Tiflis, 29 abr (EFE).- Sueño Georgiano, el partido gobernante en Georgia, continuó «usurpando el poder y reprimiendo a la disidencia», denunció Amnistía Internacional (AI), en su informe sobre el estado de los derechos humanos en el mundo en 2024.

Según AI, las recientes enmiendas legislativas adoptadas en el país caucasiano «amplían las facultades del Estado y la policía, restringiendo indebidamente las protestas pacíficas y socavando la sociedad civil».

El informe subraya que la disidencia georgiana es objeto de acoso, violencia y campañas de desprestigio.

«Más de una decena de activistas, muchos de ellos participantes en las protestas, han sido atacados violentamente, emboscados y heridos por asaltantes no identificados», denunció AI, que añadió que «al parecer algunos de esos ataques fueron coordinados, permitidos, alentados o instigados por las autoridades».

Además, la ONG indicó que la legislación aprobada en diciembre pasado permite al Gobierno reestructurar las instituciones del Estado y despedir empleados públicos de manera arbitraria.

«Para fin de año (2024) más de cien empleados públicos que había expresado abiertamente su solidaridad con los participantes en las protestas fueron, según se informó, despedidos arbitrariamente de sus trabajos», señala el informe.

AI indicó que las protestas opositoras contra ley de transparencia de la influencia extranjera y la suspensión de las negociaciones para la adhesión a la Unión Europea, así como las manifestaciones que demandaban nuevas elecciones parlamentarias, fueron disueltas con uso desmedido de la fuerza.

«Durante las protestas de abril y mayo, más de 100 personas denunciaron malos tratos, incluyendo abusos físicos y verbales, por parte de agentes del orden durante su arresto y detención», añade el documento.

La ONG indicó que «las denuncias de tortura y otros malos tratos fueron especialmente generalizadas durante las protestas de noviembre y diciembre», con más de casos y más de 80 personas hospitalizadas con lesiones graves.

«Por lo general, los manifestantes detenidos fueron llevados a lugares no revelados, incluso fuera de Tiflis, se les negó el contacto con familiares y abogados y permanecieron detenidos entre 24 y 48 horas sin una justificación razonable, como lo exige la legislación nacional», asegura el informe.

Amnistía advierte de que las leyes sobre valores familiares y protección del menor aprobadas en el país contienen «numerosas medidas homófobas y tránsfobas» que, sumadas a la retórica del Gobierno, han desatado los temores por los derechos y la seguridad del colectivo LGTBI. EFE

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