Perspectivas suizas en 10 idiomas

El barrio haredí de Jerusalén se prepara para Yom Kipur ajeno a guerras en Gaza y Líbano

Patricia Martínez Sastre

Jerusalén, 10 oct (EFE).- En las callejuelas de Mea Shearim, el barrio ultraortodoxo más conocido de Israel, no existen los móviles con acceso a internet, los ordenadores ni los noticieros televisivos: hoy aquí como cada año, y totalmente ajenos a las guerras que libra el Ejército israelí en Gaza y Líbano, miles de judíos expirarán sus pecados con el sacrificio litúrgico de pollos, previo a Yom Kipur.

Carteles verde fosforito, pegados en las calles, informan sobre la hora y el lugar dónde los vecinos deben acudir para cumplir con el ritual de ‘Kaparot’ (‘expiaciones’, en hebreo) mediante el que purgan los pecados del año (el año judío 5785 comenzó el pasado 2 de octubre) en la víspera de Yom Kipur (Día del Perdón), la festividad judía más importante destinada al ayuno y al rezo.

«Hay dos tipos de pecados», dice a EFE Samantha (nombre ficticio), una joven madre de tres hijos, originaria de Canadá, que acaba de realizar el rito. «Los pecados con uno mismo, como cuando no se trata bien a otra persona, no dona dinero, etc. y los pecados ante Dios, como cuando no se cumple con los preceptos de la Torá», detalla quien prefiere mantener el anonimato.

Momentos antes, su marido ha comprado tres pollos blancos -color de la purificación-, les ha colocado una brida en las patas y, diligentemente, los pasa entre tres y seis veces sobre la cabeza de su esposa, y después de sus hijos pequeños, mientras repetía unos versículos de oración.

De forma paralela a esta celebración, a tan solo 90 kilómetros al suroeste, al menos 28 gazatíes morían y cerca de un centenar resultaban heridos en un nuevo ataque israelí contra una escuela en Deir al Balah, centro de la Franja de Gaza, donde al igual que en Mea Shearim lo que más abundan son los niños.

«Nosotros no lo comprendemos», dice esta madre ultraortodoxa, y profesora de inglés, al ser preguntaba por EFE sobre las múltiples guerras que libra Israel. «Creemos que algún día llegará el Mesías y que habrá paz para todos», detalla.

Ultraortodoxos llamados a filas

Tras una año de guerra en Gaza y más de 42.000 palestinos muertos, cerca del 40 % de ellos niños, casi la totalidad de la sociedad israelí se ha visto afectada de una forma u otra: con hijos, padres y amigos muertos en los ataques de Hamás o en combate, alistados como reservistas o manifestándose cada sábado a favor de un acuerdo de rehenes.

A diferencia de ellos, los judíos ultraortodoxos de Israel -que constituyen casi el 13 % de la población, con una media que supera los seis hijos por mujer- hasta este julio estaban históricamente exentos de servir en el Ejército, pero un fallo del Supremo dictaminó esta medida como discriminatoria y ordenó llamarles a filas.

Esto dio origen a manifestaciones frecuentes cerca de las oficinas de reclutamiento militar, en las que miles de ultraortodoxos hombres expresaron, a voz de grito y con pancartas, que prefieren «morir» antes que abandonar su vida dedicada al rezo o jugarse la vida por un Estado cuya legitimidad no reconocen.

«¿Hay alguna estimación de cuándo llegará el Mesías?», pregunto a Samantha, a su alrededor todo son gallinas en jaulas de plástico, hombres persiguiendo a las que intentan escapar y un poco más allá, en un recinto cerrado, aves siendo degolladas que serán donadas a familias con menos recursos para estos días festivos.

Samantha responde: «Hay pistas, lo sabemos más o menos… pero ya sabes, la gente lleva diciendo que será pronto, que está cerca, hace como unos 500 años», reconoce la joven en un tono jovial, su alma ya purificada. EFE

pms/sga/jac

(foto) (vídeo)

Los preferidos del público

Los más discutidos

SWI swissinfo.ch - Sociedad Suiza de Radio y Televisión SRG SSR

SWI swissinfo.ch - Sociedad Suiza de Radio y Televisión SRG SSR