El escritor nacionalista ruso contra el que atentó Ucrania dice que volverá al frente
Moscú, 12 feb (EFE).- El escritor nacionalista ruso, Zajar Prilepin, que fue herido en un atentado con bomba en 2023 del que Moscú responsabilizó a Kiev, aseguró que volverá al frente ucraniano en cuanto supere las pruebas médicas.
«Tengo firmado un contrato y no pienso romperlo hasta que termine la operación militar especial, incluso si dura diez años, lucharé y continuaré con mi misión», afirmó el excombatiente, en declaraciones a la agencia TASS.
Según Prilepin, en cuanto la inspección médica le considere válido, volverá al frente, donde ya estuvo combatiendo en el Donbás entre 2016 y 2018.
Sin embargo, a pesar de encontrarse en buen estado, no está suficientemente bien «como para cumplir órdenes de combate», ya que afirmó no poder correr porque «los músculos no se han recuperado hasta ese punto».
El literato, que es teniente coronel de la Guardia Nacional, sobrevivió a un atentado con bomba mientras se encontraba en su vehículo el 6 de mayo de 2023 en la región de Nizhni Nóvgorod, aunque sufrió roturas en ambas piernas, mientras el conductor del vehículo falleció.
El supuesto autor del atentado, que fue detenido horas después, declaró actuar bajo órdenes de los servicios secretos ucranianos, según informó el Comité de Instrucción de Rusia.
Prilepin fue condecorado con la Orden al Valor otorgada por Vladímir Putin, se convirtió en un símbolo del nacionalismo ruso y es firme partidario de la intervención militar en Ucrania.
Entre 2016 y 2018 combatió con las fuerzas prorrusas en la guerra en el Donbás, anteriormente ya había participado en operaciones militares en Chechenia y Daguestán, en el Cáucaso norte ruso.
Además, pronto se estrenará en Rusia una serie de televisión que adapta una de sus novelas, ‘Romance rebelde’, situada en la guerra en el Este de Ucrania antes de la intervención rusa en 2022.
El autor cuenta con un programa de televisión de tertulias propagandísticas desde hace cinco años llamado ‘Lecciones de ruso’ en el canal NTV, detrás del cual se encuentra una subsidiaria de la corporación gasística Gazprom.EFE
mos/cg