El Gobierno checo cierra un acuerdo para desplazar una granja porcina situada en un excampo nazi
El Gobierno checo anunció este lunes que cerró un acuerdo para comprar una granja porcina situada en el emplazamiento de un antiguo campo de concentración nazi para gitanos en Lety, en el suroeste de República Checa, con el fin de desmantelarla.
La portavoz del Ministerio de Cultura, Simona Cigankova, indicó que el contrato con el propietario de la granja se firmará en septiembre, pero se negó a comunicar el precio de la compra.
La existencia de esta pocilga construida durante el régimen comunista en Lety, a 75 km al sur de Praga, suele ser motivo de enfado para los militantes antirracistas y los defensores de los derechos humanos.
Unos 1.300 hombres, mujeres y niños gitanos de Bohemia, una región controlada por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial, pasaron por el campo de Lety entre agosto de 1942 y mayo de 1943.
Para la mayoría de ellos fue la última etapa antes de ser trasladados a las cámaras de gas de Auschwitz-Birkenau, en Polonia. Cerca de 330 gitanos, entre ellos al menos 241 niños, murieron en Lety, sobre todo a causa del tifus.
El régimen comunista de Checoslovaquia construyó la granja porcina en ese lugar en los años 1970.
Jan Cech, un responsable de Agpi, la actual propietaria de la granja, confirmó haber aceptado la oferta del Gobierno y dijo esperar que la propiedad cambie de dueño antes de las elecciones generales de octubre.
Benjamin Abtan, el presidente del movimiento antiracista europeo EGAM, calificó lo ocurrido este lunes de hecho «histórico para la dignidad del pueblo gitano».
En agosto de 2016, el ministro de Cultura checo, Daniel Herman, había anunciado que se llegaría a un acuerdo para comprar esa granja antes del otoño (boreal) de 2017.