La CPI impone 10 años de cárcel al yihadista Al Hassan por crímenes de guerra en Mali
La Haya, 20 nov (EFE).- La Corte Penal Internacional (CPI) condenó este miércoles a diez años de prisión al yihadista maliense Al Hassan Ag Abdoul Aziz por varios crímenes de guerra y lesa humanidad cometidos en Malí como miembro de Ansar al Din, grupo terrorista asociado con Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI).
El tribunal acordó imponer a Al Hassan una sentencia conjunta de 10 años por todos los crímenes de los que se le acusa, incluidos actos inhumanos y trato cruel, mutilación, atentados contra la dignidad personal, tortura y persecución, pero también “imposición de sentencias sin juicio previo pronunciado por un tribunal regularmente constituido que brinde todas las garantías judiciales generalmente reconocidas como indispensables”.
Miembro de Ansar al Din, Al Hassan, de 47 años y padre de cinco hijos, está acusado de ser un alto cargo de la policía islámica establecida por militantes yihadistas, y de estar involucrado en el trabajo de un tribunal islámico en Tombuctú, entre el 1 de abril de 2012 y el 28 de enero de 2013.
La Sala de Primera Instancia ya había declarado a Al Hassan “culpable” de estos crímenes de guerra y lesa humanidad, aunque le absolvió de otros como ataques contra objetos protegidos, matrimonio forzoso, esclavitud sexual y violación, al considerar que no es responsable de ellos, a pesar de que estos crímenes sí han tenido lugar en Tombuctú en ese periodo.
La jueza Kimberly Prost, que leyó el fallo, también anunció que los jueces acordaron deducir de la pena total el tiempo que Al Hassan ha pasado en el centro de detención de La Haya desde su traslado a Países Bajos en marzo de 2018, aunque rechazó la petición de la defensa de reducir el tiempo adicional que el acusado pasó arrestado en Mali desde abril de 2017.
Traumas
La magistrada presidenta de la sala subrayó la “atmósfera de miedo, violencia, humillación y opresión” que vivieron las víctimas de Ansar al Din, y recordó el “efecto traumático” que dejaron en Tombuctú los crímenes de guerra y lesa humanidad en los que participó el acusado.
El castigo impuesto a Al Hassan es hoy “proporcional a la gravedad de los crímenes cometidos y las circunstancias individuales” del acusado.
Tanto el acusado como el equipo de la fiscalía tienen 30 días para apelar el fallo si así lo deciden, mientras que la cuestión de las reparaciones para las víctimas se estudiará en la próxima fase.
Al Hassan ha escuchado la pena que se le impone con un aspecto serio y desde la sala del tribunal, y no mostró ninguna reaccionar al conocer que no ha sido sentenciado a la pena máxima a la que se enfrentaba, la cadena perpetua. Acudió a la Corte vestido con una prenda larga blanca y un tagelmust también blanco cubriendo su cabeza, un atuendo masculino típico de los bereberes tuareg.
El juicio a Al Hassan, que comenzó en julio de 2020, es el segundo de la CPI a un yihadista maliense por los crímenes de Ansar al Din.
En 2021, Ahmad Al Mahdi Al Faqi fue sentenciado a una pena reducida de siete años de prisión por ordenar en 2012 la destrucción de patrimonio mundial de la Unesco en Tombuctú.
El tribunal del grupo terrorista solicitó la destrucción de nueve mausoleos y una mezquita lugar de peregrinación de la población local.
En enero 2012, comenzó en Mali un conflicto armado durante el cual Tombuctú estuvo bajo el control de varios grupos terroristas que destruyeron tesoros culturales como la célebre biblioteca. EFE
ir/cat/ajs