Mineros de oro piden justicia por cinco víctimas de una explosión provocada en Bolivia
Yani (Bolivia), 5 abr (EFE).- Mineros auríferos de la población de Yani en Bolivia pidieron justicia este sábado por las víctimas de una explosión provocada que causó una onda expansiva de un kilómetro y se cobró la vida de cinco personas, incluida una mujer embarazada de siete meses.
Según los mineros de la cooperativa ‘Hijos de ingenio’, los asociados de otra cooperativa minera llamada ‘Señor de Mayo’ realizaron un ataque con armas de fuego a su sede durante más de una hora en la madrugada del jueves y detonaron explosivos que destruyeron un edificio de cuatro plantas y toda su maquinaría utilizada para la búsqueda de oro.
“No fue un enfrentamiento, fue un ataque”, dijo a EFE Samuel Quispe, líder de los mineros de ‘Hijos de Ingenio’. Según Quispe, el conflicto se debe a la disputa de un yacimiento de oro que ambas cooperativas quieren explotar.
«Ya sufrimos cinco ataques de este tipo por los líderes de la cooperativa ‘Señor de Mayo’, la justicia no hace nada y archiva los casos», afirmó Quispe.
Brandon Acarapi, primo de Soledad Quito Acarapi, la mujer embarazada que murió en la explosión, exigió que se investigue el suceso y se dé con los culpables.
Acarapi dijo a EFE que intentó llegar a la sede de su cooperativa durante el supuesto ataque armado, pero que al acercarse en su vehículo le dispararon. Él se estuvo comunicando por mensajes de teléfono con Soledad hasta minutos antes de la explosión.
Los mineros que sobrevivieron a la fuerte explosión ahora duermen bajo lonas improvisadas, ya que sus habitaciones y pertenencias se encontraban en el edificio de su sede.
La mina se encuentra a más de 3.500 metros sobre el nivel del mar, en la comunidad rural de Yani, a más de 250 kilómetros de la ciudad de La Paz.
Es de difícil acceso por los caminos de tierra que atraviesan altas montañas y se elevan hasta a los 4.500 metros sobre el nivel del mar, antes de iniciar el descenso hacia las comunidades mineras.
En la víspera la Policía de Bolivia aprehendió a Rubén C.H., quien, según el jefe de la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen (Felcc) de La Paz, el coronel Gabriel Neme, «habría con probabilidad participado dentro de la autoría de este lamentable suceso».
En Bolivia el trabajo minero se divide entre el sector administrado por el Estado, el empresarial privado y el cooperativista, compuesto por asociaciones autónomas de afiliados sin una dependencia patronal dedicados a la explotación de minerales.
En los últimos años se han vuelto comunes los conflictos entre cooperativas mineras por el control de yacimientos en el país. EFE
eb/gb/psh
(foto) (vídeo)