Un centenar de tailandeses detenidos por operar en un centro de estafas en Camboya
Bangkok, 5 mar (EFE).- Las autoridades de Tailandia detuvieron a 100 ciudadanos de ese país que operaban voluntariamente en un centro de estafas telefónicas en Camboya, donde fueron arrestados y posteriormente repatriados, informó este miércoles la Policía tailandesa.
En un comunicado, la Policía explicó que 119 tailandeses fueron repatriados desde Camboya el pasado sábado, tras lo cual fueron sometidos a una investigación que determinó que un centenar de ellos no eran víctimas sino victimarios de estos centros de estafa, un problema que está perjudicando a millones de personas en el Sudeste Asiático.
Por ello, un tribunal tailandés ha «aprobado 102 órdenes de arresto», incluyendo a dos chinos que lideraban a estas personas, por «participar conjuntamente en una organización criminal transnacional» en la que actuaban como «ladrones y estafadores», incurriendo en un cúmulo de «delitos tecnológicos».
Estas personas, prosigue el escrito, conformaban una banda que se vale de sistemas informáticos para distorsionar o falsear datos digitales de usuarios, en contra de su voluntad y de manera perjudicial para el público».
Las autoridades remarcaron que estas detenciones se concretaron gracias a la cooperación bilateral en materia de seguridad, enmarcada en la lucha «para acabar con los centros de estafa», una causa en la que China está prestando apoyo técnico y para la que Tailandia ha destinado más recursos con miras en proteger el turismo.
La Policía encontró que los tailandeses y los dos chinos están incursos en fraudes de inversión en comercio de valores, estafas a través de falsos romances o de apuestas en línea, así como en fraudes por actuar como oficiales de electricidad y del Gobierno.
El director de la Policía tailandesa, Thatchai Pitaneelaboot, aseguró que ninguna de estas 100 personas estaba obligada en Camboya y que, por el contrario, cometieron crímenes en ese país y pretendieron pasar en Tailandia como víctimas de la trata de personas para regresar libremente y sin ser procesadas.
El Gobierno de Tailandia dijo esta semana que estudia la posibilidad de levantar un muro en su frontera con Camboya, con el objetivo de frenar el tráfico humano hacia los centros de estafa -que se presume están gestionados por mafias chinas- que se asientan allí, pero también en Birmania, Laos y Filipinas.
Desde febrero se ha desarrollado un megaoperativo en Tailandia, China y Birmania contra bandas que llevan años dedicadas a estos delitos, pero que recientemente han sido objeto de mayor escrutinio tras el rapto y posterior liberación del actor chino Wang Xing, quien en enero viajó a Bangkok atraído por una falsa oferta laboral y fue enviado a Birmania para trabajar en uno de estos recintos.
Tailandia, China y la junta militar birmana colaboran desde entonces para erradicar a las mafias que operan estos lugares, en los que se supone que operan miles de personas, muchas de ellas como esclavos modernos, algunas de las cuales ya fueron enviadas de vuelta a sus países de origen. EFE
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