Un destructor nipón penetró por error en aguas territoriales chinas
Tokio, 11 jul (EFE).- Un destructor de las Fuerzas navales de Autodefensa (Ejército) de Japón penetró la semana pasada en aguas territoriales chinas frente a la provincia oriental de Zhejiang y pese a las repetidas advertencias de navíos chinos, un incidente que derivó en protestas de Pekín, según recogieron este jueves medios nipones.
El buque Suzutsuki, que se encontraba en una misión de vigilancia de maniobras militares chinas en alta mar, llevó a cabo la incursión en aguas chinas el pasado día 4 debido a un «error de procedimiento», según dijeron fuentes diplomáticas a la agencia nipona de noticias Kyodo.
Las mismas fuentes señalaron que Pekín ha trasladado su protesta a Tokio por la incursión.
Se trata de un incidente poco habitual protagonizado por un buque de Japón, país que desde hace años viene denunciando el incremento de las aproximaciones e incursiones de navíos chinos en aguas territoriales niponas, especialmente alrededor de las islas Senkaku, administradas por Tokio pero reclamadas por Pekín, que las denomina Diaoyu.
El Ministerio de Defensa de Japón ha abierto una investigación sobre el capitán del Suzutsuki para tratar de esclarecer lo sucedido, según el citado medio.
El ministerio y el mando de las fuerza navales «llevan a cabo una vigilancia y otras actividades en el territorio marítimo y aéreo alrededor de Japón», dijo hoy el ministro portavoz del Ejecutivo, Yoshimasa Hayashi, al ser preguntado por el caso, sobre el que evitó hacer más comentarios.
El día previo a la incursión del Suzutsuki, las autoridades chinas habían decretado una zona de no navegación próxima a Zhejiang debido a unas maniobras con fuego real allí previstas, según detalles recogidos por medios nipones.
El destructor japonés, que se habría encontrado en esa zona para monitorizar dichas maniobras, recibió una advertencia por parte de navíos chinos cuando se aproximó a unos 22 kilómetros de Zhejiang, y navegó durante unos 20 minutos en aguas territoriales chinas antes de abandonarlas.
Japón considera que la incursión no vulneró la normativa internacional, en virtud de la Convención de Naciones Unidas sobre derecho marino que reconoce el derecho al «paso inocente» de barcos por aguas territoriales de otro estado a menos que comprometa su seguridad, aunque Pekín exige a los barcos extranjeros un permiso previo para penetrar en sus aguas. EFE
ahg/mra/ig