Un foro de ciudadanos de la UE debatirá sobre cómo abordar los discursos de odio
Bruselas, 4 abr (EFE).- Un foro de 150 ciudadanos de la Unión Europea (UE) seleccionados al azar arrancará este viernes sus debates, auspiciados por la Comisión Europea, sobre cómo abordar los discursos de odio en la sociedad, con el objetivo de que sus deliberaciones den pie a una serie de recomendaciones que luego orienten las políticas comunitarias sobre esta materia. En un comunicado difundido este jueves, la Comisión Europea explicó que, con este foro ciudadano, pretende extraer ideas sobre «cómo construir puentes entre grupos y comunidades fracturadas» y detalló que los 150 participantes, procedentes de los 27 países de la UE, analizarán también qué causas originan el odio hacia determinados colectivos sociales. Los debates del foro darán como resultado una lista de recomendaciones que «respaldarán» el futuro trabajo de la Comisión Europea en las actuaciones políticas que lleve a cabo próximamente para paliar los discursos de odio y los delitos de odio. Además, el Ejecutivo comunitario también aspira a que estas recomendaciones sirvan de guía para ayudar no sólo a la propia Comisión, sino también a los países miembros de la UE, a aplacar los discursos de odio y a «pasar de la división al disfrute compartido de los valores europeos». La puesta en marcha de este panel responde a la petición de «crear un espacio paneuropeo de diálogo» que formuló la Comisión Europea el pasado 6 de diciembre de 2023, en un documento en el que Bruselas comunicaba las nuevas acciones que pretendía tomar a nivel comunitario para frenar la escalada de discursos de odio. En este documento, la Comisión adelantó nuevas inversiones en seguridad para los espacios religiosos, en especial las mezquitas y las sinagogas, y anunció un aumento de la dotación de esas partidas ante la «clara evidencia del aumento del odio» que ha habido en los últimos meses en la UE. En el capítulo de los delitos de odio cometidos en Internet o redes sociales, Bruselas detalló que iba a acelerar la creación de un nuevo código de conducta reforzado para las plataformas que ya están sujetas a la ley europea de servicios digitales. Además, Bruselas prometió dar más poderes a sus coordinadores para combatir el racismo, el antisemitismo y el odio a los musulmanes, y también se comprometió a dar más financiación para formar a periodistas en cómo reconocer los discursos de odio. Los 150 participantes del foro ciudadano que arranca este viernes proceden de los 27 países miembros de la UE y fueron elegidos al azar tras un proceso que, según Bruselas, garantiza que los seleccionados sean una muestra representativa de la diversidad sociodemográfica de los Veintisiete. Se han tenido en cuenta aspectos como el género, la edad, el nivel educativo, el origen y la ocupación de las personas, si bien un tercio de las 150 plazas están reservadas a personas de entre 16 y 25 años, a fin de potenciar la presencia de jóvenes en este tipo de experiencia participativa. Los ciudadanos deliberarán tanto en grupos separados como en sesiones plenarias conjuntas, con el apoyo de equipos especializados y un comité de expertos, según explicó la Comisión Europea en el comunicado. El formato se inspira en el funcionamiento de la Conferencia sobre el Futuro de Europa (CoFoE), un macroforo ciudadano desarrollado entre 2019 y 2022, en el cual personas elegidas al azar elaboraron propuestas para reformar la UE, en un proceso en el que luego intervinieron miembros de todos los organismos comunitarios y representantes de los países miembros. EFE bfm/cat/ad